Mercados digitales en jaque ante la volatilidad macroeconómica

Bitcoin y Ethereum caen: ¿qué factores reales están detrás del retroceso de las criptomonedas?

UNSPLASH/KANCHANARA
Las principales criptomonedas sufrieron un revés este lunes, cuando Bitcoin tocó su nivel más bajo en casi dos semanas y Ethereum cayó hasta su piso mensual. Aunque la Reserva Federal recortó tasas recientemente, otros bancos centrales decidieron mantenerlas, y las disputas comerciales siguen siendo motivo de inseguridad para los inversores.

El mercado de las criptomonedas vivió este lunes una jornada complicada. Bitcoin se deslizó un 2,5 % hasta situarse en torno a los USD 113.000, mientras que Ethereum cayó aproximadamente un 6-7 %, tocando niveles que no se veían desde hace un mes.

Detrás de esta corrección se encuentran varios elementos que combinan tanto lo estructural como lo coyuntural. Por un lado, el mercado está reaccionando al reciente recorte de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos —un ajuste moderado de 25 puntos básicos— que, aunque esperado, no despejó las dudas sobre la continuidad de la política monetaria expansiva.

Mientras tanto, instituciones como el Banco Central Europeo, el Banco de Inglaterra y el Banco de Japón optaron por mantener sus tipos sin cambios, lo que introduce un contraste importante en el panorama global.

Otro factor que pesa mucho es la incertidumbre en torno a las relaciones comerciales globales. Las tensiones arancelarias entre EE.UU. y sus principales socios siguen siendo uno de los riesgos macroeconómicos más citados por analistas. Ese ambiente provoca cautela entre los inversores que, tras los fuertes avances recientes, han comenzado a tomar beneficios.

Se suma a esto un fenómeno técnico: altas cotas de apalancamiento en ciertas posiciones de criptomonedas, combinadas con liquidez endeble en momentos decisivos, lo que amplifica las caídas. En particular, Ethereum ha sufrido liquidaciones considerables en las últimas horas.

Para el ámbito empresarial y de inversiones, los retrocesos actuales deben interpretarse con calma. No todo lo que baja indica un colapso estructural, pero sí es una señal de que las expectativas estaban muy altas. Las criptomonedas, en especial las más grandes como Bitcoin y Ethereum, parecen estar en una fase de consolidación tras alcanzar máximos recientes. Muchos inversores evaluarán si este es un punto de entrada atractivo o si conviene esperar más claridad en políticas monetarias, decisiones regulatorias o señales de recuperación en los mercados globales.

En definitiva, aunque el pesimismo ha dominado los titulares de hoy, no se trata necesariamente de un escenario catastrófico, sino más bien de una pausa obligada. Las criptomonedas, por su naturaleza volátil, responden rápidamente a los gestos de bancos centrales, al ánimo regulatorio y a los choques comerciales. Las empresas relacionadas con blockchain, fondos de inversión y emisores de servicios ligados a cripto activos deberán afinar sus estrategias de cobertura de riesgos y vigilar de cerca los siguientes pasos de las autoridades monetarias y financieras.