Crisis en EE.UU.: los mercados caen mientras Trump culpa a los demócratas por el cierre del Gobierno y el oro alcanza los 4.000 dólares
Los principales índices bursátiles de Estados Unidos terminaron el día con pérdidas este martes, mientras el cierre del Gobierno sigue sin resolverse. Donald Trump culpó nuevamente a los demócratas por el estancamiento, calificando la situación de "ataque kamikaze". En medio de la incertidumbre, el precio del oro alcanzó los 4.000 dólares por onza, lo que refleja la creciente aversión al riesgo de los inversores.
Los mercados bursátiles de EE. UU. cerraron en territorio negativo este martes, afectados por la falta de progreso en el cierre del Gobierno y el creciente nerviosismo en los mercados. El presidente Donald Trump volvió a arremeter contra los demócratas, acusándolos de ser responsables del bloqueo político que mantiene cerrado el Gobierno federal, al que calificó como un "ataque kamikaze".
El promedio industrial Dow Jones cayó un 0,20%, mientras que el Nasdaq 100 sufrió una pérdida del 0,55% y el S&P 500 terminó con una disminución del 0,38%. Los inversores permanecieron cautelosos ante el impasse político en Washington, que mantiene bloqueada la aprobación de los presupuestos federales.
Por otro lado, en medio de esta incertidumbre, el oro alcanzó un hito histórico, superando la barrera de los 4.000 dólares por onza por primera vez, a medida que los inversores se refugiaron en activos seguros. La aversión al riesgo aumentó debido a la falta de avances en las negociaciones sobre el cierre del Gobierno, lo que impulsó la demanda de metales preciosos como refugio ante la volatilidad del mercado.
El euro también perdió terreno frente al dólar, cayendo un 0,55% a las 3:58 pm ET y alcanzando los 1,16502 dólares. La depreciación del euro se sumó a la cautela generalizada, mientras los inversores evalúan las posibles repercusiones del cierre gubernamental en la economía global.
La crisis del cierre del Gobierno continúa siendo uno de los factores clave que afectan a los mercados financieros en EE. UU., con la incertidumbre sobre el futuro económico del país dominando el sentimiento de los inversores. Aunque algunos analistas esperan que se llegue a una solución política, el impacto de esta paralización en los mercados podría continuar a medida que se prolonga la inestabilidad política en Washington.