Marco Rubio ningunea a Europa y lanza un aviso a navegantes con Venezuela: "Que se mantenga al margen"
La tensión política entre Estados Unidos, Venezuela y la Unión Europea acaba de sumar un nuevo episodio, y esta vez con una advertencia directa desde Washington. El senador republicano Marco Rubio, una de las voces más influyentes en política exterior dentro del Congreso estadounidense, ha lanzado un mensaje contundente dirigido a Bruselas: “La Unión Europea no tiene autoridad para decirle a Estados Unidos cómo defender su seguridad nacional.”
Sus palabras llegan en un momento de máxima sensibilidad, con la región latinoamericana inmersa en una escalada de violencia vinculada —según Estados Unidos— a organizaciones criminales y estructuras vinculadas al narcotráfico que operan desde suelo venezolano.
“Estados Unidos está siendo atacado”
Rubio no se anduvo con matices. Habló abiertamente de “narcoterroristas” y de grupos criminales que, según él, “operan en nuestro hemisferio” y han puesto en riesgo la seguridad de Estados Unidos.
El senador defendió las actuaciones del presidente norteamericano ante estas amenazas y dejó claro que, para él, la reacción estadounidense no admite debate internacional:
“Estados Unidos está siendo atacado por narcoterroristas del crimen organizado en nuestro hemisferio, y el presidente está respondiendo en defensa de nuestro país.”
Para Rubio, lo esencial es que Washington conserve libertad total de acción ante cualquier amenaza proveniente de América Latina. Y eso incluye, según sus palabras, que la Unión Europea no interfiera en las decisiones estratégicas de su país.
Un choque diplomático que abre un debate mayor
El mensaje de Rubio no surge en el vacío. En los últimos meses, Bruselas ha mostrado preocupación por una posible escalada militar en la región y ha pedido contención a ambas partes. Desde el Parlamento Europeo hasta distintas capitales, la UE ha intentado empujar hacia una salida diplomática.
Pero la respuesta del senador ha sido un portazo:
“No creo que la Unión Europea tenga la capacidad de determinar qué es el derecho internacional.”
Con esta frase, Rubio cuestiona directamente la legitimidad de la UE como actor internacional para opinar sobre la respuesta de Washington frente a Venezuela. Un dardo que, inevitablemente, reabre el viejo debate sobre quién marca las reglas en el tablero geopolítico occidental.
La posición europea, entre la cautela y la preocupación
Mientras Estados Unidos endurece su narrativa, la Unión Europea ha optado por transmitir prudencia:
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Preocupación por la escalada.
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Llamamientos al diálogo.
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Peticiones para evitar una crisis regional mayor.
El problema para Bruselas es que, frente a un discurso tan áspero como el de Rubio, su postura corre el riesgo de sonar irrelevante en Washington.
Un escenario que podría complicarse
Lo que está en juego no es solo un rifirrafe diplomático.
Venezuela es un punto caliente donde convergen intereses geopolíticos, migratorios, energéticos y de seguridad. La presencia de grupos armados, organizaciones criminales transnacionales y el impacto en países vecinos convierten cualquier movimiento en una partida delicada.
Y ahora, con las palabras de Rubio, queda claro que Estados Unidos no está dispuesto a aceptar recomendaciones externas sobre cómo manejar su respuesta.
Un mensaje que deja a la UE en una posición incómoda
La frase del senador —“manténganse al margen”— no es solo una declaración.
Es una advertencia.
Un recordatorio de que, para parte del liderazgo político estadounidense, Europa debe limitarse a observar y no intervenir en los asuntos que Washington considera internos.
El conflicto entre Estados Unidos y Venezuela sigue abierto, pero ahora tiene un nuevo flanco:
la relación diplomática con la Unión Europea, que se ve obligada a equilibrar su papel internacional sin entrar en un choque directo con su principal aliado.