Trump anuncia que viajará a China a comienzos del próximo año tras una llamada con Xi Jinping
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que planea visitar China a principios del próximo año, después de mantener una conversación telefónica con su homólogo Xi Jinping en la que abordaron comercio, la crisis del fentanilo, la guerra en Ucrania y el acuerdo pendiente sobre TikTok. Ambos mandatarios se verán antes en la cumbre del APEC en Corea del Sur, en un gesto que marca un giro diplomático en medio de tensiones globales.
Donald Trump sorprendió al anunciar a través de Truth Social que viajará a China en la primera parte del próximo año, un movimiento que busca relanzar las relaciones entre las dos principales potencias en un momento de alta complejidad internacional. El anuncio se produjo tras una conversación telefónica con Xi Jinping, en la que ambos líderes coincidieron en la necesidad de avanzar en asuntos clave como los acuerdos comerciales, la crisis del fentanilo, el conflicto en Ucrania y la situación de TikTok, cuyo futuro sigue siendo un punto delicado en la agenda bilateral.
La llamada, descrita por Trump como “muy productiva”, parece abrir una nueva fase de entendimiento entre Washington y Pekín, después de meses marcados por tensiones arancelarias, disputas tecnológicas y diferencias en torno a la seguridad global. Según adelantó el presidente estadounidense, ambos líderes se reunirán en persona durante la cumbre de la APEC en Corea del Sur, mientras que Xi Jinping viajará a Estados Unidos “en un momento apropiado”, lo que añade relevancia al calendario diplomático de los próximos meses.
Más allá del simbolismo, este acercamiento tiene implicaciones directas para el comercio mundial y para la estabilidad geopolítica. El mercado interpreta que un mayor diálogo puede suavizar la presión sobre sectores sensibles como la tecnología y la energía, al tiempo que refuerza la posibilidad de acuerdos parciales que reduzcan la incertidumbre económica. El hecho de que el fentanilo y la guerra en Ucrania también hayan estado en el centro de la conversación refleja la amplitud de los desafíos compartidos.
Trump insistió en que ambos mandatarios seguirán en contacto a través de llamadas telefónicas, lo que refuerza la idea de una relación más fluida. De cara a 2025, la expectativa de un viaje oficial a China podría convertirse en un hito para redefinir la cooperación y la competencia entre ambas potencias, con repercusiones que irán desde las cadenas de suministro globales hasta el tablero diplomático en Asia y Europa.