Apple ficha a la ex Meta Jennifer Newstead y prepara la salida de dos pesos pesados
Apple ha anunciado una remodelación relevante en su primera línea ejecutiva. Jennifer Newstead, procedente de Meta y con amplia experiencia en el gobierno de Estados Unidos, se incorporará en enero como vicepresidenta sénior y asumirá el cargo de general counsel el 1 de marzo de 2026, en sustitución de Kate Adams. La compañía también ha confirmado la retirada de Lisa Jackson, responsable de Medio Ambiente, Políticas y Social, lo que reorganiza el mapa de poder interno en áreas clave como legal, asuntos públicos y sostenibilidad.
Relevo en la asesoría jurídica: entra Jennifer Newstead
Apple reveló que Jennifer Newstead se incorporará a la compañía en enero como vicepresidenta sénior y que, a partir del 1 de marzo de 2026, asumirá el rol de asesora general (general counsel), relevando a Kate Adams, que tiene previsto retirarse a finales del próximo año tras casi una década en el puesto.
Durante el periodo de transición, Adams continuará al frente del equipo legal y asumirá temporalmente la cartera de Government Affairs, antes de cederla a Newstead cuando esta tome plenamente el relevo. La propia Apple ha adelantado que el cargo de Newstead se ampliará para incluir la supervisión conjunta de Legal y Government Affairs, concentrando en una sola figura el control de los frentes jurídicos y regulatorios de la compañía.
Salida de Lisa Jackson y nueva ubicación de sostenibilidad en la estructura
El anuncio también confirmó que Lisa Jackson, hasta ahora vicepresidenta de Medio Ambiente, Políticas y Iniciativas Sociales, se retirará a finales de enero de 2026. Su marcha implica una reordenación de las áreas que lideraba:
– Las divisiones de Medio Ambiente y Social Initiatives pasarán a depender del director de Operaciones (COO), Sabih Khan.
– Government Affairs se integrará primero bajo la órbita de Kate Adams y posteriormente bajo la de Newstead.
Este cambio supone que una parte clave de la agenda de sostenibilidad y responsabilidad social de Apple se traslada al área de Operaciones, alineando más directamente los compromisos ambientales con la gestión de la cadena de suministro, la fabricación y la logística global.
Un perfil con peso en Silicon Valley y en Washington
Antes de su fichaje por Apple, Jennifer Newstead fue directora jurídica (chief legal officer) en Meta y previamente ejerció como asesora legal del Departamento de Estado de Estados Unidos. Este doble perfil —tecnológico y gubernamental— resulta especialmente valioso para una compañía que opera bajo un escrutinio constante en materia de privacidad, competencia, regulación digital y relaciones internacionales.
El consejero delegado de Apple, Tim Cook, destacó que Newstead aporta una “extraordinaria profundidad de experiencia” al equipo de liderazgo, al tiempo que elogió la contribución de Kate Adams y Lisa Jackson durante su mandato. Bajo su supervisión, Apple ha reforzado su imagen como compañía comprometida con la privacidad, la descarbonización y la responsabilidad social, ámbitos cada vez más relevantes para inversores, reguladores y consumidores.
Qué significa este movimiento para el futuro de Apple
La reconfiguración del organigrama llega en un momento en que Apple se enfrenta a desafíos regulatorios crecientes en Estados Unidos, Europa y otros mercados clave. Desde las normas de competencia y las leyes sobre tiendas de aplicaciones, hasta las exigencias ambientales y sociales en la cadena de suministro, la compañía necesita una estrategia jurídica y de relaciones institucionales muy coordinada.
Al concentrar Legal y Government Affairs bajo una única figura y acercar Medio Ambiente y Social a Operaciones, Apple parece querer:
– Agilizar la toma de decisiones en temas regulatorios y políticos.
– Integrar mejor los objetivos de sostenibilidad en el núcleo del negocio.
– Ganar músculo a la hora de dialogar —y negociar— con gobiernos y reguladores.
Con estos cambios, Apple no solo gestiona una transición generacional en su liderazgo, sino que se prepara para una etapa donde la batalla competitiva se libra tanto en el mercado como en el terreno regulatorio y reputacional.