China insta a Estados Unidos a resolver la disputa comercial “mediante el diálogo y la igualdad”
El Ministerio de Comercio de China (MOFCOM) expresó su deseo de que Estados Unidos aborde las crecientes tensiones comerciales a través del diálogo, tras la reciente imposición de tasas portuarias a los buques chinos. Pekín respondió con medidas restrictivas similares, acusando a Washington de actuar de manera “unilateral y proteccionista” y de violar los principios de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Escalada comercial en los puertos
La relación económica entre las dos mayores potencias del mundo vuelve a tensarse. A partir de hoy, Estados Unidos ha comenzado a aplicar tasas portuarias adicionales a los buques procedentes de China, alegando prácticas comerciales desleales y desequilibrios en el acceso a sus terminales marítimas. Pekín respondió de inmediato con restricciones a los barcos estadounidenses, calificando la decisión de Washington como “un acto típico de unilateralismo y proteccionismo”.
El portavoz del Ministerio de Comercio chino afirmó en rueda de prensa que esta medida “viola gravemente las normas de la OMC y el principio de igualdad y reciprocidad” recogido en el Acuerdo Marítimo entre ambos países.
Llamamiento al diálogo
Pese a la firmeza del mensaje, China se mostró abierta a la negociación. “Lucharemos si es necesario. Tenemos las puertas abiertas si Estados Unidos quiere dialogar”, aseguró el portavoz. Desde Pekín, se insistió en la necesidad de “corregir los errores” y de trabajar conjuntamente “en la misma dirección” para resolver las preocupaciones mutuas “mediante el diálogo y la consulta en igualdad de condiciones”.
El tono diplomático, aunque firme, marca la voluntad de China de mantener canales abiertos de comunicación, en un contexto donde la cooperación sigue siendo clave para evitar una nueva guerra comercial de gran escala.
Contexto de una relación cada vez más frágil
Las tensiones entre ambos países se han intensificado en los últimos meses por cuestiones tecnológicas, energéticas y geoestratégicas. Washington ha incrementado sus controles a la exportación de chips avanzados y componentes críticos hacia China, argumentando motivos de seguridad nacional. Pekín, por su parte, ha reforzado su política de autosuficiencia tecnológica y ha respondido con restricciones sobre materiales estratégicos, como tierras raras y grafito.
La disputa portuaria se suma así a un conjunto de fricciones que reflejan la competencia por el liderazgo económico global. Expertos señalan que, más allá de los gestos políticos, ambas economías mantienen una fuerte interdependencia que hace inevitable el diálogo.
Un equilibrio delicado
Mientras los mercados internacionales observan con cautela los próximos movimientos, los analistas advierten que prolongar esta escalada podría afectar al comercio marítimo y a las cadenas de suministro globales. En este contexto, el mensaje del MOFCOM busca proyectar una imagen de firmeza, pero también de responsabilidad diplomática.
China, aseguran los expertos, intenta posicionarse como defensora del multilateralismo frente al proteccionismo estadounidense. El reto será mantener esa postura sin agravar el enfrentamiento comercial que ya afecta a múltiples sectores estratégicos.