Nuevos pactos con Washington en la mira de Kiev

El equipo de Zelensky planea firmar cuatro acuerdos con EE. UU.

El equipo de Zelensky planea firmar cuatro acuerdos con EE. UU. - EPA/LUDOVIC MARIN

Andriy Yermak, jefe de gabinete del presidente de Ucrania Volodymyr Zelensky, anunció que Kiev aspira a cerrar cuatro acuerdos bilaterales con Estados Unidos que abarcarán suministro de armas, producción conjunta de drones, libre comercio y garantías de seguridad. Una misión ucraniana visitará Washington esta semana para negociar dos de esos pactos, mientras que una delegación encabezada por la primera ministra se desplazará en octubre. Las declaraciones reflejan una estrategia de diplomacia activa para reforzar el respaldo estadounidense en medio de la guerra con Rusia.

En una coyuntura en la que el conflicto ruso-ucraniano sigue redefiniendo los mapas de la seguridad transatlántica, Ucrania busca consolidar un nuevo nivel de relación estratégica con Estados Unidos. Así lo dejó claro Andriy Yermak, quien anunció públicamente que Kiev pretende alcanzar acuerdos en cuatro dimensiones clave: armamento, producción conjunta de drones, liberalización comercial y garantías de seguridad.

El calendario está ya en marcha. Una delegación ucraniana viajará esta semana a Washington para avanzar en las negociaciones de dos de esos acuerdos. Además, Yermak ya anticipó que él mismo y Rustem Umerov (secretario del Consejo de Seguridad y Defensa de Ucrania) podrían seguir la ronda diplomática, mientras que la primera ministra Yulia Svyrydenko tiene previsto un viaje a EE. UU. para mediados de octubre.

Aunque no se han revelado los detalles precisos —la sensibilidad estratégica lo impide— estas iniciativas encajan con movimientos recientes del gobierno ucraniano. Por ejemplo, Kiev ha formulado lo que algunos llaman un “Mega Deal” de armas por unos 90.000 millones de dólares con EE. UU., además de un acuerdo paralelo para la compra y producción de drones. En su reciente paso por EE. UU., Zelensky ya planteó esas ambiciones.

El ámbito de las garantías de seguridad, por su parte, abre el capítulo más complejo. Desde 2022, Ucrania ha insistido en acuerdos explícitos que trasciendan el apoyo militar coyuntural y creen compromisos duraderos que disuadan futuras agresiones. Yermak indicó que ya se trabaja en un componente militar de esas garantías, con la misión de evitar repetir los errores del Memorando de Budapest (1994), que garantizaba la integridad de Ucrania a cambio de su desnuclearización pero no impidió la anexión de Crimea ni la agresión rusa posterior.

El acuerdo comercial (free trade) aparece como el cuarto eje clave, aunque su ejecución podrá depender del resultado de los otros tres pactos. En este ámbito, Ucrania ya cuenta con varios acuerdos bilaterales y mecanismos de integración con bloques como la Unión Europea. No obstante, un pacto comercial con EE. UU. le permitiría diversificar socios, atraer inversiones y fortalecer su economía de guerra y posguerra.

Para Washington, estos acuerdos podrían definir su rol estratégico en Europa Oriental por años. Los analistas observan que el presidente Donald Trump ha manifestado apertura para estudiar el suministro de misiles de largo alcance como los Tomahawk, lo cual transformaría el apoyo militar estadounidense a Ucrania.

Para Ucrania, el riesgo es elevado: dependerá de la firmeza política estadounidense, la aprobación del Congreso, condiciones que EE. UU. imponga y la capacidad de Kiev para cumplir contrapartidas. Si todo avanza con éxito, esos pactos podrían volverse hitos que marquen el grado de compromiso estratégico entre Ucrania y Estados Unidos en la era posguerra.