La mirada académica sobre la tensión entre Moscú, Washington y Bruselas

Putin, Trump y la nueva geopolítica: ¿hacia un orden mundial tras la guerra de Ucrania?

El catedrático José Antonio Gurpegui analiza las declaraciones de Vladimir Putin y plantea que la guerra en Ucrania podría marcar un punto de inflexión similar al de la Segunda Guerra Mundial. La relación con Donald Trump y las fisuras en la OTAN son claves para entender el futuro.

La retórica de Vladimir Putin frente a Occidente ha vuelto al primer plano de la geopolítica mundial. José Antonio Gurpegui, catedrático de estudios norteamericanos, recuerda que tras la caída del Muro de Berlín se prometió a Gorbachov que la OTAN no avanzaría “ni un centímetro hacia el este”, una promesa incumplida con la sucesiva adhesión de países del antiguo bloque soviético. Ese agravio histórico alimenta hoy el discurso del Kremlin.

Pese a ello, Gurpegui se muestra escéptico con la idea de que Rusia tenga ambiciones expansionistas más allá de Ucrania. “Putin creyó que sería un paseo hasta Kiev, pero el coste humano y económico ha sido mucho mayor de lo esperado”, afirma. El experto considera improbable que Moscú busque un enfrentamiento directo con un bloque mucho más poderoso en términos militares y económicos.

Otro punto de fricción clave es el militar. Rusia ha señalado sus líneas rojas: no a tropas europeas en territorio ucraniano, no a misiles de medio alcance en Kiev y el papel de Ucrania como amortiguador entre Moscú y la OTAN. El enfado ruso también se explica por la retirada de Estados Unidos del tratado de misiles de alcance medio, un acuerdo vigente desde Gorbachov que Washington abandonó unilateralmente. Ante el despliegue de armamento occidental, Gurpegui ve más probable una respuesta a través de la guerra electrónica que una escalada nuclear.

En este tablero, Donald Trump se convierte en pieza fundamental. Putin ha elogiado su pragmatismo y Gurpegui no descarta que, de haber estado en la Casa Blanca, la guerra podría haberse evitado. Las demandas iniciales del Kremlin –una Ucrania neutral y libre de tropas y misiles occidentales– habrían sido asumibles para Trump. “Putin le ha tomado la medida”, concluye el catedrático, al describir la relación zigzagueante entre ambos líderes.

El desenlace de la guerra será determinante para el futuro global. Gurpegui sostiene que su resolución tendrá consecuencias comparables a la Segunda Guerra Mundial, con la instauración de un nuevo orden internacional. El conflicto