Wall Street desafía la paralización federal con optimismo bursátil

EE.UU. abre con alzas en Bolsa mientras el Gobierno sigue sin actividad

EE. UU. abre con alzas en Bolsa mientras el Gobierno sigue sin actividad - UNSPLASH / THOMAS HABR

Los principales índices de Wall Street arrancaron al alza este viernes, pese al bloqueo administrativo que mantiene cerrado el Gobierno por tercer día. El S&P 500, el Nasdaq 100 y el Dow Jones registraron ligeras subidas en la apertura, alentados por la expectativa de recortes de tasas y la intervención del Ejecutivo para presionar a los demócratas.

La Bolsa de Nueva York abrió con buen tono este viernes en medio de la incertidumbre fiscal que genera el cierre parcial del Gobierno federal, una paralización que llega ya a su tercer día. El S&P 500 subió 0,13 %, el Nasdaq 100 avanzó un 0,15 % y el Dow Jones ganó 0,18 % en el arranque de la sesión. Según Reuters, estos movimientos reflejan una creciente esperanza entre los inversores de que la Reserva Federal podría anticipar recortes en las tasas de interés.

El Gobierno de Trump, por su parte, ha movilizado más de 400 grupos de interés para aumentar la presión política sobre los demócratas y desbloquear el financiamiento. Según reportes, el vicepresidente JD Vance expresó durante una rueda de prensa que no espera que el cierre dure mucho, señalando indicios de grietas entre los legisladores demócratas moderados.

Los mercados han mostrado una notable resiliencia frente al impasse: incluso con la falta de datos oficiales por el cierre de agencias públicas como el Bureau of Labor Statistics, los operadores parecen apostar por una recuperación rápida y apoyada por políticas monetarias expansivas. En efecto, el paro administrativo impide la publicación del informe laboral mensual de septiembre, lo que puede complicar la evaluación del panorama macroeconómico.

Más allá del clima alcista, subsisten riesgos significativos. Un cierre prolongado podría erosionar la confianza empresarial y del consumidor, frenar el gasto público y obstaculizar la fluidez de operaciones clave. Analistas han advertido que la carencia de datos macroeconómicos eleva la dificultad para que la Fed tome decisiones bien fundamentadas en su próxima reunión.

Históricamente, los cierres del Gobierno en EE. UU. —aunque disruptivos para la administración pública— han tenido impactos limitados en el mercado bursátil si son relativamente breves. Según estudios, el S&P ha tendido a mantenerse estable o incluso a subir en episodios pasados. Pero esa tendencia no garantiza que esta ocasión sea igual: la combinación de deuda elevada, crisis globales y expectativas monetarias ajustadas añade una capa de complejidad mayor.

En el frente cambiario, el euro ganó 0,19 % frente al dólar durante la mañana en EE. UU., situándose en torno a 1,17390 USD. Esto sugiere que los inversores internacionales también están reajustando posiciones ante la apuesta por estímulos monetarios y la debilidad relativa del dólar.

Los mercados apostaron por una apertura optimista pese al cierre gubernamental. Esa confianza se apoya en expectativas de alivio monetario, solidez estructural de las grandes compañías y la creencia de que el impasse no se prolongará excesivamente. Sin embargo, el desenlace dependerá de la capacidad de los políticos en Washington para pactar acuerdos fiscales y de la Reserva Federal para responder con agilidad ante un entorno cada vez más fragmentado.