Ibex 35 alcanza máximos históricos impulsado por la misma líder del mercado
El Ibex 35 volvió a firmar este jueves una sesión para enmarcar. El principal índice de la bolsa española subió un 0,97% y cerró en los 16.746 puntos, un nuevo máximo histórico, impulsado por el tirón de Inditex y por las crecientes apuestas del mercado a que la Reserva Federal (Fed) recortará los tipos de interés la semana que viene.
Mientras en otros momentos del año dominaba el miedo a una recesión y a tipos altos durante más tiempo, ahora el guion parece haberse girado: los inversores quieren llegar al famoso “rally de Navidad” con las carteras bien cargadas de renta variable.
Europa acompaña el rally español
El buen tono no fue exclusivo de la bolsa española. El DAX alemán se anotó un avance del 1%, mientras que el CAC 40 francés y el EuroStoxx 50 subieron en torno al 0,4%. No son subidas espectaculares, pero sí consolidan la idea de que el mercado empieza a descontar un escenario algo más benigno para la renta variable en 2026.
Dicho de otro modo: si la Fed cumple el guion y recorta tipos, y no aparecen sobresaltos imprevistos, diciembre tiene todos los ingredientes para cerrar por todo lo alto en las bolsas.
La Fed y el empleo en EEUU: el gran telón de fondo
La gran referencia que sobrevuela todas las pantallas es la reunión de la Reserva Federal de la próxima semana. Los últimos datos de empleo en Estados Unidos han alimentado la idea de que el banco central tiene margen para aflojar el freno.
Por un lado, el informe de empleo privado de ADP salió más flojo de lo esperado, lo que sugiere cierta moderación en la creación de puestos de trabajo. Por otro, las peticiones semanales de subsidio de desempleo cayeron a mínimos de tres años, un dato que va justo en la dirección contraria a lo que desearía un mercado que sueña con un alivio monetario claro.
“En conjunto, la lectura neta de los datos confirma fuerzas contrapuestas en el mercado laboral”, apuntaba Ian Lyngen, de BMO Capital Markets. Y esa dualidad es justo lo que complica la decisión de la Fed: enfriar demasiado deprisa puede ser peligroso, pero mantener la presión de tipos altos también.
Aun así, el consenso del mercado se inclina por un recorte de tipos, aunque la comunicación de Jerome Powell será tan importante como el propio movimiento: cualquier matiz sobre el ritmo de futuros recortes puede disparar la volatilidad en cuestión de minutos.
El Tesoro español, cómodo con el apetito inversor
En el plano doméstico, España aprovechó el buen momento de mercado. El Tesoro colocó 3.360,7 millones de euros en una subasta de bonos y obligaciones del Estado, en el rango medio previsto. La clave estuvo en que pudo recortar la rentabilidad ofrecida en el tramo a cinco años, reflejando que los inversores siguen mostrando interés por la deuda española en un entorno de tipos que, en teoría, va camino de moderarse.
Menos rentabilidad para el inversor implica, en la práctica, un alivio financiero progresivo para el Estado si la tendencia se mantiene en próximas emisiones.
Inditex vuelve a tirar del Ibex 35
En el lado corporativo, el protagonismo volvió a ser para Inditex. El gigante textil sumó otro 2,6% en la sesión, después del espectacular 8% del día anterior tras la presentación de resultados. La compañía gallega se ha convertido de nuevo en uno de los grandes motores del selectivo y está ayudando a que el Ibex se descuelgue al alza frente a otros índices europeos.
Grifols fue el valor más alcista de la jornada, con una subida del 3,2%, mientras que Caixabank rebotó un 2,3%. También destacaron las subidas de Acciona (+2,4%) y BBVA (+2,1%), reflejando que la apuesta por valores ligados al ciclo económico sigue viva.
En el lado negativo, Redeia se dejó un 1,4%, seguida por IAG (-1,3%), Bankinter (-1,2%) y Acerinox (-1%). Son correcciones puntuales en un contexto de fondo claramente alcista.
¿Queda gasolina para más subidas?
Con el Ibex 35 en zona nunca vista, la gran pregunta es inevitable: ¿hay margen para seguir subiendo o estamos cerca de un techo temporal? Desde Banca March recuerdan que “las bolsas mantienen la estacionalidad positiva en los últimos compases del año, apoyadas en una guerra comercial en retroceso, una política monetaria menos restrictiva y un año de beneficios empresariales crecientes”.
En cristiano: si la Fed no estropea la fiesta y los resultados empresariales no decepcionan, el mercado podría seguir premiando a la renta variable unas semanas más.
Eso sí, con el índice en máximos históricos, cualquier tropiezo –un mensaje más duro de lo esperado de Powell, un dato macro que se tuerza o resultados flojos de algún gran valor– puede servir de excusa para recoger beneficios.
De momento, la foto es clara: el Ibex 35 vive uno de sus mejores momentos de la historia reciente y ha convertido el cierre de 2025 en un escaparate de optimismo bursátil que pocos se atrevían a pronosticar a principios de año.