El Nikkei cae un 1,3% y Asia se divide tras la decisión del Banco de Corea de mantener los tipos
Los principales índices bursátiles de Asia-Pacífico cerraron con resultados mixtos este jueves, tras conocerse que el Banco de Corea (BoK) decidió mantener sin cambios su tipo de interés de referencia, en un contexto marcado por la incertidumbre económica global y la debilidad del consumo interno.
La decisión del BoK de mantener su tasa clave en el 3,5%, nivel en el que permanece desde enero de 2023, refleja la cautela del banco central ante la persistente inflación y el temor a enfriar aún más el crecimiento económico. El gobernador Rhee Chang-yong aseguró en rueda de prensa que la prioridad es “controlar las presiones inflacionarias sin comprometer la estabilidad financiera”, señalando que los próximos meses serán decisivos para determinar si el ciclo de endurecimiento monetario ha terminado definitivamente.
La noticia provocó reacciones dispares en los mercados. El índice surcoreano Kospi se mantuvo plano a las 4:24 am CET, mientras que el Hang Seng de Hong Kong cayó un 0,41%, afectado por la debilidad de los valores tecnológicos y las tensiones con Estados Unidos por las restricciones al sector de semiconductores.
Por su parte, el Nikkei 225 de Japón sufrió una fuerte caída del 1,34%, arrastrado por las ventas en las grandes exportadoras, mientras que los índices chinos Shanghai Composite (-1,03%) y Shenzhen Composite (-1,06%) retrocedieron ante la falta de estímulos económicos adicionales por parte de Pekín. En contraste, el S&P/ASX 200 australiano cerró prácticamente sin cambios.
Contexto regional y reacción del mercado cambiario
La decisión del Banco de Corea llega en un momento en que varios bancos centrales asiáticos —incluyendo Japón y Filipinas— están evaluando si seguir el ejemplo de la Reserva Federal estadounidense, que podría recortar tipos antes de fin de año. En el mercado de divisas, el dólar estadounidense avanzó 0,31% frente al yen japonés, situándose en ¥152.43, su nivel más alto en tres semanas, reflejando un mayor apetito por activos seguros.
Analistas de Bloomberg y Reuters coincidieron en que el mensaje del BoK fue “más conservador de lo esperado”, lo que podría prolongar el entorno de tipos elevados hasta el primer trimestre de 2026.
Con la inflación aún lejos del objetivo y las economías asiáticas mostrando señales de fatiga, los inversores se mantienen prudentes. El tono moderado del Banco de Corea confirma que Asia entra en una fase de espera, pendiente de las próximas decisiones monetarias globales y de los datos económicos que marcarán el rumbo del cierre de año.