El Nikkei y el Kospi lideran las subidas en Asia tras las ganancias en Wall Street y el optimismo político en EE.UU.
Las bolsas asiáticas cerraron mayoritariamente al alza este miércoles, impulsadas por el avance de Wall Street y las expectativas de que el Gobierno estadounidense reabra pronto. El Nikkei japonés, el Kospi surcoreano y el Hang Seng de Hong Kong registraron las mayores subidas de la sesión.
Los mercados de la región Asia-Pacífico mantuvieron el tono alcista este miércoles, siguiendo el impulso positivo de Wall Street, donde los principales índices cerraron con ganancias ante el creciente optimismo sobre el fin del cierre del Gobierno de Estados Unidos.
En Tokio, el Nikkei 225 avanzó un 0,22 %, apoyado por la recuperación de las compañías tecnológicas y exportadoras, beneficiadas por la depreciación del yen. En Seúl, el Kospi Composite subió un 1,17 %, impulsado por el repunte de los valores de semiconductores y por la confianza de los inversores en la estabilidad política y económica regional.
En Hong Kong, el Hang Seng registró una ganancia del 0,99 %, mientras que en China continental, el Shanghai Composite sumó un 0,30 %, y el Shenzhen Composite se mantuvo estable. Por su parte, el S&P/ASX 200 australiano aumentó un 0,23 %, en línea con la tendencia positiva de la región.
El buen desempeño de las bolsas asiáticas refleja el efecto contagio de Wall Street, donde el Dow Jones subió más de 500 puntos en la jornada anterior tras las declaraciones del presidente Donald Trump, quien aseguró que “el país volverá a abrirse” después de más de 40 días de parálisis administrativa. El optimismo político ha devuelto la confianza a los mercados y ha favorecido la toma de posiciones en renta variable.
El sector tecnológico volvió a ser uno de los motores de la sesión asiática, con fuertes avances en las empresas de chips, componentes electrónicos y servicios digitales, especialmente en Corea del Sur y Taiwán. Los inversores continúan apostando por el crecimiento del ecosistema de inteligencia artificial y semiconductores, pese a las correcciones recientes registradas en Estados Unidos.
En el mercado de divisas, el dólar se fortaleció un 0,17 % frente al yen, situándose en ¥154,38, un nivel que respalda la competitividad de las exportaciones japonesas. Sin embargo, algunos analistas advierten que una depreciación prolongada del yen podría presionar los precios de importación y la inflación doméstica en Japón.
El tono positivo en Asia también se vio apoyado por la estabilidad en los precios del petróleo y por la expectativa de que los bancos centrales de la región mantengan una política monetaria acomodaticia en el corto plazo. “Los inversores están respondiendo al alivio político en Washington y al sentimiento global más constructivo”, explicó Tomo Kanda, estratega de Nomura Holdings.
No obstante, los analistas subrayan que el avance de hoy podría ser moderado y temporal, a la espera de que se confirme la votación final para la reapertura del Gobierno estadounidense y de los próximos datos macroeconómicos de China. “El mercado celebra una mejora de corto plazo, pero sigue pendiente de señales claras de recuperación económica en el gigante asiático”, apuntó Li Wei, economista de Citic Securities.
En conjunto, la jornada deja un mensaje de optimismo prudente en la región Asia-Pacífico: los inversores celebran el impulso de Wall Street y las señales políticas positivas desde EE. UU., pero sin perder de vista la fragilidad del entorno económico global y la volatilidad de los mercados tecnológicos.