"EEUU no va a dejar en paz a Europa: debe congraciarse con China para no tener problemas económicos"
"EEUU no va a dejar en paz a Europa: debe congraciarse con China para no tener problemas económicos". Pampillón
Rafael Pampillón, catedrático de economía en la Universidad CEU San Pablo, explica que las tensiones comerciales y los aranceles impuestos por Estados Unidos afectarán también a las economías europeas. En particular, menciona que Europa sufriría el encarecimiento de productos importados de EE.UU., como los agrícolas (soja, maíz, nueces, etc.), lo que elevaría los precios y afectaría el bienestar económico. Además, destaca que, al igual que EE.UU., Europa también podría enfrentarse a represalias en forma de aranceles sobre sus productos exportados a EE.UU., lo que dificultaría las ventas europeas en el mercado estadounidense.
Pampillón resalta la interdependencia económica entre Europa y China, subrayando que el crecimiento de China es crucial para las economías europeas. Si China no crece al ritmo esperado o si su crecimiento es más bajo de lo que las estadísticas sugieren, esto afectaría negativamente tanto a Europa como a EE.UU., ya que China es uno de los principales compradores de productos y servicios a nivel global. Si China no tiene una demanda fuerte, no solo afectará sus propios productos, sino también aquellos exportados desde Europa y EE.UU.
En relación con los aranceles impuestos por Estados Unidos, Pampillón menciona que la situación también genera efectos secundarios para Europa. Si EE.UU. y China continúan con sus disputas comerciales y la cadena de suministro global se ve afectada, Europa se verá perjudicada de manera indirecta. Por ejemplo, señala que Europa podría enfrentar un aumento en el costo de los productos chinos debido a los aranceles, lo que incrementaría los precios de importación. Además, si China impone represalias a las exportaciones de EE.UU., las empresas europeas también sufrirían debido a la menor demanda global.