La explosión de ciberataques impulsa un boom histórico: los proyectos de ciberseguridad entre freelancers crecen un 35%
El Día Mundial de la Ciberseguridad llega con un dato que sintetiza el momento actual: los encargos vinculados a seguridad digital entre freelancers en Europa han aumentado un 35% en el último año, según el informe Malt Tech Trends 2025. La combinación de amenazas crecientes, nuevas normativas y el avance de la inteligencia artificial ha situado este sector en el centro de la inversión tecnológica.
La ciberseguridad atraviesa uno de los momentos más críticos de su historia. La aceleración digital, el auge de la inteligencia artificial y un entorno geopolítico inestable han creado una tormenta perfecta que multiplica las vulnerabilidades. Ninguna industria —salud, banca, retail, administración pública o energía— se libra de una oleada de amenazas cada vez más sofisticadas. Y ese contexto ha desencadenado, según el informe Malt Tech Trends 2025, un crecimiento del 35% en los proyectos de ciberseguridad encargados a profesionales independientes en Europa durante el último año. Un salto nunca visto que está remodelando el mercado laboral tecnológico.
Para entender la magnitud del fenómeno, basta con observar cómo los propios sistemas de IA requieren protección avanzada. Cada modelo procesa millones de datos —incluidos datos sensibles, financieros o clínicos— y toma decisiones críticas que afectan a la operativa diaria de las empresas. Este nivel de exposición abre nuevos vectores de riesgo: ataques a modelos, manipulación de datos de entrenamiento, accesos no autorizados y fugas de información. Lo que antes era un añadido a la infraestructura es ahora un pilar absolutamente esencial para garantizar la continuidad de negocio.
Las compañías han entendido este cambio de paradigma. Lo que antes era una capa adicional incorporada al final del desarrollo, hoy se concibe como un requisito estructural que debe estar presente desde la fase de diseño. También ha cambiado la sensibilidad de los directivos: la ciberseguridad no es un gasto, es una inversión estratégica que garantiza el funcionamiento del resto de la organización. Y cuando la demanda se dispara, también lo hace la necesidad de talento especializado.
Un mercado que crece a doble dígito y no tiene techo
En una economía globalizada donde los datos circulan sin fronteras, el mercado de plataformas de gobernanza, riesgo y cumplimiento (GRC) se proyecta hacia los 95.000 millones de euros en 2034. Esta cifra refleja una transformación estructural: las empresas no solo necesitan defenderse de ciberataques, sino cumplir con nuevas regulaciones que exigen trazabilidad, investigación forense y gestión avanzada de riesgos.
Las normativas DORA y NIS2, diseñadas para reforzar la resiliencia digital de sectores críticos, han tenido un impacto directo en Europa. Según los datos recogidos por Malt, cerca de la mitad de los nuevos perfiles de ciberseguridad se centran hoy en auditoría, compliance y gobernanza del riesgo, áreas clave para cumplir estos estándares. El talento freelance especializado en ciberseguridad dentro de la plataforma creció un 41% en el último año, impulsado precisamente por esta ola regulatoria.
Esto no solo refleja la complejidad técnica del ecosistema digital actual, sino el reconocimiento creciente de que muchas empresas no pueden absorber internamente toda la especialización que necesitan. Externalizar a expertos independientes permite flexibilidad, coste eficiente y acceso a perfiles con nichos de conocimiento muy concretos.
Las habilidades más buscadas por las empresas
El estudio señala que ciertas competencias están experimentando un crecimiento acelerado por su relevancia práctica en entornos de riesgo extremo.
Pentesting (pruebas de penetración)
Este tipo de simulación de ataques se ha vuelto imprescindible. Los pentesters no solo detectan vulnerabilidades, sino que replican el comportamiento de atacantes reales para evaluar el nivel de resistencia de un sistema. Su trabajo se integra ya de forma continua en el ciclo de vida del software.
Normativa DORA y resiliencia operativa
Los expertos en este reglamento son cada vez más necesarios en bancos, fintechs y proveedores de servicios TIC. La capacidad de asegurar la continuidad operativa, incluso en escenarios de interrupción severa, se ha vuelto una competencia estratégica.
EDR (Endpoint Detection and Response)
Las soluciones de EDR se están consolidando como estándar en grandes organizaciones. Su combinación de análisis en tiempo real, inteligencia artificial y respuesta automática ante amenazas complejas convierte a estos sistemas en la primera línea de defensa frente a ataques avanzados.
A estas habilidades se suman otras como SIEM, seguridad cloud, identidad digital, automatización defensiva o forense digital.
Ciberseguridad e IA: una ecuación inseparable
Irène Kleiber, directora de seguridad de Malt, lo resume con claridad:
“De la mano de las ciberamenazas, regulaciones y el avance de la IA, las soluciones SIEM siguen creciendo, proporcionando oportunidades considerables para los expertos en este campo”.
La inteligencia artificial ha elevado exponencialmente el potencial de los atacantes, pero también el de los defensores. Es una carrera continua donde la velocidad de reacción define quién tiene la ventaja. En este tablero dinámico, los freelancers se han convertido en aliados clave: perfiles que combinan alta especialización técnica, capacidad de adaptación y disponibilidad inmediata.
Además, la soberanía tecnológica se ha convertido en un tema estratégico para Europa. No se trata solo de proteger infraestructura, sino de garantizar que los datos y los sistemas críticos no dependan de proveedores externos con legislaciones incompatibles. La ciberseguridad es ahora un asunto de competitividad y autonomía digital.
El poder del talento independiente
La figura del freelance se consolida como solución para las empresas que necesitan cubrir picos de demanda, incorporar conocimiento muy específico o ejecutar proyectos con gran rapidez. Plataformas como Malt han profesionalizado este ecosistema, creando entornos donde la búsqueda, contratación y pago se integran en procesos sencillos, transparentes y seguros.
Las cifras hablan por sí solas: más de 90.000 empresas y una comunidad de 900.000 expertos independientes, con capacidades que abarcan desde tecnología y datos hasta consultoría estratégica. En un mercado donde la velocidad es clave, disponer de este talento on-demand es una ventaja competitiva evidente.
Una transformación que va mucho más allá de la tecnología
El aumento del 35% en los proyectos de ciberseguridad representa algo más profundo que una moda o un pico temporal: es la señal de una transformación estructural del mercado tecnológico. La seguridad ha pasado de ser un complemento a convertirse en el cimiento sobre el que se construyen todas las capas de innovación digital.
A medida que la IA se integra en todos los procesos, los modelos de negocio se digitalizan y las regulaciones se endurecen, la demanda de perfiles especializados seguirá creciendo. Europa se enfrenta a una década decisiva en la que deberá reforzar su soberanía digital y garantizar que su infraestructura crítica está preparada para amenazas cada vez más sofisticadas.
La figura del freelance, flexible, experto y orientado a resultados, se presenta como un pilar clave para afrontar esta nueva realidad. El futuro de la ciberseguridad —y de la competitividad europea— pasa por ellos.