EE.UU. prueba misil nuclear Minuteman III tras urgencia de Trump
La Fuerza Aérea de EE. UU. ha lanzado este miércoles un misil Minuteman III nuclear-capaz desde la Base Espacial Vandenberg en California, como parte de un ejercicio preprogramado. Este lanzamiento llega poco después de que el presidente Trump pidiera reanudar las pruebas de armas nucleares tras más de 30 años.
La Fuerza Aérea de los Estados Unidos llevó a cabo este miércoles una exitosa prueba del misil intercontinental Minuteman III desde la Base Espacial Vandenberg en California. El lanzamiento, realizado sin carga nuclear, forma parte de un ejercicio preprogramado y fue supervisado por el Comando de Ataque Global Aéreo. El misil, que fue lanzado a las 00:45 a.m. hora local, alcanzó con éxito su objetivo cerca del Sitio de Pruebas de Defensa de Misiles Balísticos Ronald Reagan en las Islas Marshall, a más de 6.700 millas de distancia.
Este lanzamiento llega en un contexto de creciente tensión geopolítica, especialmente después de que el presidente de EE. UU., Donald Trump, pidiera la reanudación de las pruebas de armas nucleares por parte de los militares estadounidenses. Trump sugirió que era necesario reactivar estos ensayos, que no se han realizado en más de 30 años, como una medida para fortalecer la capacidad disuasoria del país ante las crecientes amenazas nucleares globales.
El lanzamiento del Minuteman III se produce en un momento crucial, ya que las tensiones en torno al desarme nuclear y la proliferación de armas nucleares continúan siendo una de las principales preocupaciones de seguridad internacional. Las pruebas de misiles como el Minuteman III son una parte integral de las estrategias de disuasión nuclear de los Estados Unidos, garantizando que el país mantenga un arsenal nuclear efectivo y listo para ser utilizado si fuera necesario.
Trump ha sido crítico con las restricciones internacionales sobre las pruebas nucleares, argumentando que la renuncia a las pruebas de armas nucleares por parte de los EE. UU. ha dejado al país en una posición vulnerable frente a potencias nucleares rivales como Rusia y China. Su postura sobre este tema ha reavivado el debate sobre los acuerdos internacionales de no proliferación nuclear y la necesidad de una mayor transparencia y control sobre las armas nucleares en un contexto de crecientes tensiones globales.
En cuanto al Minuteman III, es uno de los misiles balísticos intercontinentales más avanzados de los EE. UU., con una capacidad de alcance de más de 13.000 kilómetros. Estos misiles forman parte del arsenal nuclear estadounidense, y su efectividad y precisión son claves para el equilibrio de poder en el ámbito internacional.
Este lanzamiento también refleja la fortaleza y capacidad de disuasión nuclear que EE. UU. mantiene a través de su fuerza aérea, lo que sigue siendo un componente esencial de su estrategia de defensa y de su relación con los aliados de la OTAN.