Berlín sufre un apagón masivo que deja a miles de hogares sin luz
La capital alemana se enfrenta a un corte eléctrico que afecta a decenas de miles de ciudadanos. Las autoridades investigan un posible ataque contra infraestructuras críticas, en medio de la creciente tensión por la fragilidad de la red eléctrica europea.
Berlín ha amanecido entre la incertidumbre y la preocupación tras un apagón que ha dejado sin electricidad a decenas de miles de hogares. El corte, que se produjo de manera repentina, ha generado un fuerte impacto en la vida cotidiana de la capital alemana y ha puesto en alerta a las autoridades locales. Según las primeras informaciones, el origen del suceso podría estar relacionado con un ataque a varias torres de alta tensión por parte de grupos extremistas, aunque por el momento no se han confirmado más detalles.
La policía alemana trabaja de manera conjunta con las empresas energéticas para restablecer el suministro lo antes posible y esclarecer lo sucedido. La posibilidad de que se trate de un sabotaje ha intensificado la preocupación en torno a la seguridad de las infraestructuras críticas, un asunto que ya estaba en el centro del debate europeo en los últimos meses.
El incidente en Berlín se suma a un contexto más amplio de vulnerabilidad energética en el continente. Goldman Sachs ha alertado recientemente del deterioro progresivo de la red eléctrica en Europa, mientras que grandes compañías eléctricas españolas han advertido sobre la presión que sufre su infraestructura, llegando incluso a calificar la situación como un “colapso histórico”.
Para los analistas, el apagón en la capital alemana pone de manifiesto los riesgos de un sistema que se enfrenta a una doble amenaza: por un lado, el envejecimiento y la saturación de la red; por otro, la creciente exposición a posibles ataques. La seguridad energética, en este escenario, se convierte en un reto estratégico para Europa, que debe acelerar la modernización de sus infraestructuras y reforzar la protección de sus instalaciones más sensibles.
En Berlín, mientras tanto, miles de ciudadanos siguen a la espera de recuperar la normalidad, en un episodio que podría marcar un punto de inflexión en la manera en que Alemania y sus socios europeos abordan la protección de su red eléctrica.