París frustra un nuevo intento terrorista

Francia detiene a dos adolescentes por planear ataques contra la Torre Eiffel

Dos menores de 15 y 17 años han sido arrestados por planear atentados contra la Torre Eiffel y sinagogas en París. Ambos mostraban simpatía por el Estado Islámico y compartían propaganda yihadista en redes cifradas.

La amenaza terrorista vuelve a golpear a Francia, aunque esta vez ha sido neutralizada a tiempo. Las autoridades francesas han detenido a dos adolescentes, de 15 y 17 años, acusados de planear ataques contra la Torre Eiffel y varias sinagogas de París. La noticia, adelantada por medios locales, confirma que los jóvenes estaban bajo vigilancia por su radicalización.

Según fuentes judiciales, ambos compartían propaganda del Estado Islámico a través de aplicaciones de mensajería cifrada y mantenían conversaciones sobre la posibilidad de unirse a la jihad en el extranjero. También se sospecha que buscaban armas en la dark web, un indicio de que sus planes, aunque todavía incipientes, iban más allá de la mera retórica.

Los detenidos provienen de familias musulmanas de origen árabe. El primero, nacido en 2010 en Val-de-Marne, y el segundo, nacido en 2008 en París, ya habían sido arrestados a finales de junio en una operación relacionada con actividades de terrorismo. La reincidencia ha encendido todas las alarmas en la fiscalía antiterrorista, que ha imputado a ambos por delitos de terrorismo.

El objetivo de la Torre Eiffel no es casual. El monumento más emblemático de París ha sido objeto de múltiples amenazas a lo largo de los años. Una de las más recordadas fue en 1994, cuando un grupo islamista intentó estrellar un avión secuestrado contra la estructura. Este último caso evidencia que el símbolo parisino sigue siendo un objetivo prioritario para quienes buscan sembrar el terror en Francia.

El Gobierno francés ha reforzado las medidas de seguridad en torno a los grandes monumentos y lugares de culto judíos tras las recientes detenciones. Mientras tanto, expertos en radicalización juvenil insisten en la necesidad de reforzar los programas de prevención, pues cada vez son más los adolescentes que caen en redes de propaganda extremista en internet.

Con esta operación, Francia vuelve a situarse en el centro del debate europeo sobre cómo abordar la radicalización y el terrorismo en menores de edad. La detención de los adolescentes ha evitado una tragedia, pero también reabre la discusión sobre los límites entre seguridad, integración y prevención en una sociedad cada vez más expuesta a las tensiones globales.