Emergencia climática en Arizona

Una tormenta de polvo colapsa la visibilidad y desata el pánico en el centro-sur de Arizona

El Servicio Meteorológico Nacional emitió una alerta urgente por tormenta de polvo en Maricopa, advirtiendo de visibilidad casi nula y desplazamientos de alto riesgo para la población.

El centro-sur de Arizona vivió el pasado lunes 1 de septiembre una jornada marcada por la incertidumbre y el temor. Una gigantesca pared de polvo se acercó a la localidad de Maricopa, obligando a las autoridades a activar de inmediato una advertencia especial por tormenta de polvo.

El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) advirtió que el fenómeno podía generar “visibilidad casi nula”, lo que representa un riesgo extremo para la circulación de vehículos y para la seguridad de los residentes de la zona. El organismo insistió en que la población debía permanecer en resguardo y evitar cualquier desplazamiento innecesario mientras persistiera la alerta.

Las tormentas de polvo en Arizona, conocidas como haboobs, son relativamente frecuentes durante la temporada del monzón, pero la magnitud de la registrada en Maricopa ha sorprendido por su intensidad y extensión. Este tipo de eventos climáticos extremos han ido en aumento en los últimos años, alimentando el debate sobre los efectos del cambio climático en la región y sobre la necesidad de fortalecer los sistemas de prevención y alerta temprana.

Los expertos recuerdan que, además del riesgo inmediato para la conducción y los accidentes viales, estas tormentas representan un peligro para la salud respiratoria, especialmente en personas con condiciones médicas previas. La inhalación de polvo puede desencadenar crisis asmáticas o complicaciones en individuos con enfermedades pulmonares.

La recomendación oficial sigue siendo clara: resguardarse en lugares cerrados, mantener puertas y ventanas selladas y esperar a que las condiciones mejoren. Mientras tanto, la comunidad de Arizona permanece en estado de alerta, consciente de que la naturaleza puede alterar la rutina diaria en cuestión de minutos.