Trump reivindica su legado económico y critica duramente a Biden y Powell ante la Reserva Federal

El panorama económico estadounidense vuelve a tensarse a pocas horas de una de las decisiones más aguardadas: la política de tipos de interés de la Reserva Federal. Mientras los mercados se preparan para una posible reducción, Donald Trump irrumpió con un discurso contundente que no dejó indiferente a nadie.

En un acto masivo, el expresidente no solo defendió su gestión económica sino que lanzó críticas directas hacia Joe Biden y Jerome Powell, trasladando el debate fiscal y monetario a su terreno, con tintes propios de una lucha política sin cuartel.

Trump presentó un relato en el que se autopostula como el solucionador del “desastre fiscal” que, según él, dejaron los demócratas a su paso. Insistió en que, en sus once meses recientes en el poder, se habría conseguido frenar la inflación y hacer que los salarios reales volvieran a crecer tras un bajón acusado durante la era Biden.

¿Pero qué hay detrás de sus afirmares? Entre acusaciones de un gobierno radical que dañó la economía y un llamamiento a restaurar el “espíritu estadounidense”, el exmandatario se esforzó por pintar un retrato de recuperación que, a todos luces, está aún en plena discusión entre analistas y expertos.

El foco no solo estuvo en la Casa Blanca actual. Jerome Powell, cabeza visible de la Fed, fue blanco de las diatribas presidenciales. Para Trump, sus decisiones y las políticas monetarias implementadas habrían contribuido al cuadro económico que él califica como catastrófico.

En el fondo, un mensaje claro: responsabilizar a los contrincantes políticos y financieros mientras busca recuperar terreno en la carrera electoral. ¿Es esta estrategia efectiva? Solo el tiempo, y los mercados, lo dirán.

Mientras tanto, la Reserva Federal mantiene la atención de todos. A las ocho de la tarde se esperaba conocer una probable bajada de tipos, medida que podría aliviar o tensionar aún más la economía norteamericana. Los precios del petróleo, el comportamiento de Wall Street y la evolución salarial serán indicadores clave para medir el impacto real de estas políticas.

Resulta, pues, fascinante cómo en un solo escenario se mezclan la política, la economía y el teatro público, dando forma a una narrativa que no solo informa, sino que también polariza y dinamiza el debate nacional.