Becerril (OMEL) cree que la vuelta a unos precios de la luz a 50 euros/MWh está “un poco lejos”

MADRID, 30 (EUROPA PRESS)

La presidenta del Operador del Mercado Eléctrico (OMEL), Carmen Becerril, ha considerado que el actual contexto energético está predominado por una “situación estresante y cargada de incertidumbres”, y ha vaticinado que la vuelta de unos precios de la electricidad al entorno de los 50 euros por megavatio/hora (MWh) está “un poco lejos”.

En su participación en el VI Congreso Nacional de Energías Renovables organizado por APPA Renovables, Becerril señaló que los futuros del mercado eléctrico auguran unos precios de la electricidad de más de 200 euros/MWh para 2023, de 150 euros/MWh para 2024, de 91 euros/MWh para 2025 y de 75 euros/MWh para 2026, frente al precio de referencia que había venido siendo en los últimos 25 años de unos 50 euros/MWh.

Así, añadió que ya para 2032 la cotización a futuro se sitúa en unos 52,61 euros/MWh, por lo que “los 50 euros/MWh los tenemos un poco lejos”, dijo.

En este sentido, Becerril afirmó que el “eslabón débil” actualmente de la cadena es el gas natural, con un precio disparado respecto a la referencia de 20 euros/MWh que había sido normal. “Hoy por hoy no existe y no sabemos cuándo vamos a conseguir de nuevo ese punto de equilibrio”, advirtió.

LA SUBASTA FUE COMPETITIVA.

Respecto a la última subasta de renovables del pasado 22 de noviembre, que se saldó con la adjudicación de apenas 45,5 MW de los 3.300 MW que había en juego, Becerril señaló, citando la valoración del informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que fue “transparente y competitiva”.

“Lo que dice que había oferta en la mesa suficiente para cubrir el volumen de la energía que había en juego”, añadió, a pesar de que finalmente la mayor parte de los MWs que se buscaban adjudicar quedaron desiertos por el precio de reserva.

En lo que respecta a la reforma del mercado eléctrico puesta sobre la mesa por Bruselas para atajar el actual contexto de precios, la presidenta de OMEL consideró que se ha optado por “matar al mensajero”. “Como el mercado pone los precios y no nos gustan, pues hay que cambiar el mercado”, dijo, añadiendo que se trata igual de un mensaje “simplista”.