“China tiene la sartén por el mango. Xi podría echarle un rapapolvo a Trump”. Luis Rodrigo
Adrián Zelaia, presidente Ekai Group, mantiene que “China ha lanzado un órdago a Trump y está decidida a mantener el pulso a EE.UU.”, Pekín está manejando la situación de manera estratégica, con una visión a largo plazo, reduciendo su dependencia del comercio exterior y particularmente de Estados Unidos. Y, asegura que “China y EE.UU. llegarán a un acuerdo en semanas o en meses”, similar a lo sucedido en el primer mandato de Trump.
Santiago Armesilla, politólogo y rector del Instituto Beatriz Galindo, afirma que “China y Trump tendrán que tragarse su orgullo para alcanzar un acuerdo”. Señala que el verdadero conflicto no es solo una cuestión de aranceles, sino que involucra la lucha por la hegemonía global, donde China parece estar ganando terreno. La cuestión de “quién se tragará el orgullo” es clave en las negociaciones, y aunque las formas de Trump puedan ser cuestionadas, él cree que su enfoque puede ser más beneficioso para los intereses de Estados Unidos en el largo plazo.
Luis Rodrigo de Castro, secretario académico y profesor colaborador, doctor en la facultad de derecho de la Universidad CEU San Pablo, cree que “China tiene la sartén por el mango. Xi podría echarle un rapapolvo a Trump”. Sostiene que el mundo está cada vez más diversificado en términos comerciales, no solo China, sino también países como Vietnam, Canadá, Australia y varios países africanos están jugando un papel importante en el comercio global.