El año pasado, en plena pandemia, el sector de la belleza movió más de 200.000 millones de euros en el mundo (según L’Oreal).
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España está mucho más presente de lo que podría parecer. Nuestro país lidera la lista de exportadores de productos cosméticos, ocupando la octava posición en volumen de exportaciones. Si nos centramos en el mercado de perfumes, el país ibérico ocupa la segunda posición detrás de Argentina. En volumen de ventas está por encima del aceite de oliva, el calzado o el vino.
Desde 2010 el sector mantiene un crecimiento medio por encima del 4% anual que está ligado al interés de cuidar nuestra belleza, cada vez más ligado a la salud.
Hemos visto que, en los último tiempos, los grandes del textil como Inditex o H&M han lanzado su propia línea de cosméticos ante el crecimiento del sector, con la intención de atraer a nuevos clientes, con la intención de captar cuota de mercado.
Pero, ¿Qué hay detrás de este ‘boom’ de la cosmética y por qué cada vez hay más marcas que se lanzan a competir en él?
