ESPECIAL PIB EEUU: La economía se frena, pero trae un balón de oxígeno para la administración Trump
La economía de EEUU ha mostrado un retroceso del 0,2% en el último trimestre de 2024, según el dato definitivo del PIB, que ha mejorado la estimación preliminar, situada en una caída del 0,3%. A pesar de tratarse de una contracción, el resultado ha superado las expectativas del mercado y ha sido recibido como un signo positivo en un contexto de volatilidad e incertidumbre. Además, se han conocido las solicitudes semanales de subsidio por desempleo, que se han ubicado en 240.000, por encima de las 229.000 estimadas inicialmente. Tras conocerse los datos, los futuros de la renta variable estadounidense han reaccionado al alza. El S&P 500 ha subido un 0,5%, el Nasdaq 100 ha avanzado un 0,75% y los futuros del Dow Jones han repuntado un 0,24%. El verde ha predominado en Wall Street, consolidando el tono optimista en los mercados.
David Ardura, Director de Inversiones de Finaccess Value, destaca que el dato del PIB de EE.UU., aunque ligeramente mejor de lo esperado, no reduce significativamente la tensión en los mercados. Señala que gran parte del alivio proviene de un ajuste en las importaciones, y no de una mejora estructural del crecimiento. Explica que si se descuenta ese efecto, el ritmo de la economía estadounidense no es tan negativo como parece, aunque advirtió que los aranceles podrían desencadenar un doble impacto: menor crecimiento y mayor inflación.
Víctor Morales, Gestor de Fondos en Anta Asset Management, mantiene que el dato de PIB no supone un cambio significativo de escenario, destacando la importancia de separar el efecto de las importaciones en el análisis. Remarca que la volatilidad actual, derivada de la incertidumbre política y comercial, genera oportunidades para los gestores activos. También advierte que las decisiones judiciales que paralizan la reforma fiscal de Trump aumentan aún más la incertidumbre, aunque no descartan que sea solo un retraso. En su opinión, es momento de prudencia, a la espera de más datos que confirmen el rumbo económico.
Jaime Santos, Analista de Mercados de ING España, subraya que, aunque el dato revisado del PIB es menos negativo (-0,2% en lugar de -0,3%), refleja una economía más débil que la del año pasado. Critica la política comercial de EE.UU., tildándola de errática, y cree que los aranceles no solucionarán los desequilibrios estructurales como el déficit ni reindustrializarán el país a corto plazo.
Pedro Sánchez, CEO de AvaTrade Spain, afirma que el dato del PIB no es preocupante, aunque refleja una ligera desaceleración en la economía estadounidense en medio de la incertidumbre generada por la política arancelaria de Donald Trump. Subraya que mientras no se aclare la duración y magnitud de estos aranceles, tanto consumidores como empresas seguirán con cautela. Respecto a la inflación, opina que el deflactor PCE será clave, ya que cualquier alza sostenida podría afectar la política monetaria.