Europa se endeuda, Moscú bombardea, Gaza se asfixia y China aprieta las tuercas: así se redibuja el poder mundial en 24 horas

EP_VON_DER_LEYEN

Las últimas 24 horas han dejado una fotografía nítida —y preocupante— del estado del mundo: la guerra se libra con drones y con deuda, y Europa sigue aprendiendo, tarde, que la geopolítica no se administra; se ejerce. En Bruselas, tras horas de negociación, la UE ha optado por endeudamiento conjunto (joint borrowing) para garantizar 90.000 millones de euros a Ucrania en 2026–2027, aparcando —por ahora— el uso directo de los activos rusos inmovilizados, aunque manteniendo el expediente abierto. 

En el frente, Moscú insiste en su estrategia más cínica: castigar la electricidad, el transporte y la vida civil. Kiev, a su vez, demuestra que no está dispuesta a ser víctima pasiva: golpea la logística rusa con drones en Rostov. 

En Oriente Medio, la dimensión humanitaria vuelve a ser un vector estratégico: ONU y más de 200 organizaciones advierten de un posible colapso operativo en Gaza por trabas administrativas y de registro impuestas por Israel. 

Y en Asia, el mundo entra en fase de disuasión industrial: Washington aprueba el mayor paquete de armas para Taiwán; Pekín responde con el control fino de tierras raras, licencias de exportación de acero y un esfuerzo de “proyecto Manhattan” tecnológico para romper el monopolio occidental en chips avanzados. 

 

II. NOTICIAS MÁS IMPORTANTES DE LAS ÚLTIMAS 24 HORAS

1. La UE cambia de carril: de los activos rusos al endeudamiento conjunto para financiar a Ucrania (2026-2027)

Hechos

La UE acuerda 90.000 millones de euros de apoyo a Ucrania para 2026–2027 y, ante la complejidad y el coste político del plan de usar activos rusos inmovilizados como colateral inmediato, decide financiarse mediante endeudamiento conjunto (joint borrowing) en mercados, asegurado contra el presupuesto de la UE. 

El texto excluye de obligaciones y garantías a Hungría, Eslovaquia y la República Checa, fórmula que desbloquea la unanimidad. 

A la vez, UE y Parlamento seguirán trabajando en un préstamo “sobre la base de” los activos del banco central ruso inmovilizados, con una lógica clave: Ucrania sólo lo reembolsaría cuando reciba reparaciones de Moscú, y, hasta entonces, los activos rusos seguirían inmovilizados. 

El nudo sigue siendo Bélgica: 185.000 millones de un total de 210.000 millones están en Euroclear, y Bruselas exige garantías ante riesgos legales y de liquidez; Rusia ya ha movido ficha con demandas, incluida una reclamación de 230.000 millones de dólares contra Euroclear. 

Implicaciones

Europa evita el vacío financiero de 2026–2027, pero el mensaje es ambiguo: garantiza dinero, pero retrasa el golpe moralmente más justificado, que sería convertir el dinero del agresor en palanca estructural para defender al agredido. En lo inmediato, bien; en lo estratégico, insuficiente.

Además, la “unidad por excepción” —sacar a tres Estados del esfuerzo— compra tiempo, pero también normaliza el sabotaje interno. Si la UE no da prioridad a la cohesión estratégica, acabará gobernada por minorías de bloqueo.

 

2. Rusia intensifica la “guerra de la electricidad”: 180.000 consumidores sin luz tras ataques nocturnos

Hechos

Ucrania informa de 180.000 consumidores sin suministro eléctrico tras un ataque ruso nocturno, afectando a cinco regiones (incluidas Mykolaiv, Zaporizhzhia, Cherkasy, Dnipropetrovsk y Sumy). 

En el área de Odesa, un ataque con drones mata a una mujer e hiere a sus tres hijos, dañando infraestructura energética y provocando apagones prolongados, además de afectar rutas hacia el Danubio. 

Se reporta también un asalto “masivo” sobre Cherkasy con heridos y cortes de luz. 

Implicaciones

Esto no es un efecto colateral: es doctrina. Moscú busca agotamiento social, presión política y colapso logístico en invierno. La respuesta occidental debe ser doble: defensa antiaérea y capacidad de reparación a escala industrial. Si no, la guerra se decide en subestaciones y transformadores, no en mapas.

 

3. Kiev golpea la logística rusa: tres muertos en los ataques con drones en Rostov

Hechos

Ataques con drones atribuidos a Ucrania en la región rusa de Rostov dejan tres muertos, incluidos dos tripulantes de un buque de carga incendiado en el puerto de Rostov-on-Don; hay heridos entre la tripulación y en Bataysk. 

Implicaciones

Ucrania intenta romper el monopolio psicológico del Kremlin: la guerra también alcanza a la retaguardia rusa. Es un instrumento de presión legítimo en una guerra existencial, pero debe mantenerse con disciplina: objetivos militares y logísticos, no espectáculo indiscriminado. Cada paso mal calibrado es munición propagandística para Moscú.

 

4. Gaza al borde del colapso operativo: ONU y más de 200 ONG alertan de trabas israelíes

Hechos

ONU y organizaciones humanitarias advierten que la operación de ayuda en Gaza podría colapsar si no se levantan impedimentos, incluida una política de registro descrita como “vaga, arbitraria y altamente politizada”, que pondría a numerosas ONG ante el riesgo de cierre. 

Implicaciones

Israel tiene derecho —y deber— de defenderse de Hamás, organización terrorista. Pero la estrategia no puede divorciarse de la realidad: sin capacidad humanitaria operativa no hay estabilización posible, y el vacío se llena con radicalización y redes yihadistas. El terreno humanitario no es caridad: es seguridad.

 

5. Venezuela: “bloqueo” a petroleros sancionados, tensión con Moscú y maniobras hacia China

Hechos

La orden de Trump de un “bloqueo total y completo” a petroleros sancionados que entren o salgan de Venezuela ha paralizado parte del tráfico por temor a incautaciones, elevando la presión sobre la principal fuente de ingresos del régimen. 

En paralelo, PDVSA autoriza la salida hacia China de dos superpetroleros no sancionados con cargamentos de alrededor de 1,9 millones de barriles cada uno, mientras persiste el fenómeno de la “flota en la sombra (shadow fleet)” y el apagado de transpondedores. 

Implicaciones

Hay que decirlo sin eufemismos: el chavismo es una narcodictadura. Golpear su músculo financiero puede ser eficaz si se hace con inteligencia y coordinación regional. El riesgo es la respuesta asimétrica del régimen y la búsqueda de oxígeno en Teherán y Moscú. Precisamente por eso, la presión debe ser sostenida, jurídica y operativa, no meramente retórica.

 

6. Taiwán: Washington aprueba el mayor paquete de armas de su historia (11.100 millones de dólares)

Hechos

Estados Unidos anuncia un paquete de 11.100 millones de dólares con HIMARS, obuses, misiles anticarro y drones, orientado a reforzar la “guerra asimétrica (asymmetric warfare)” de Taiwán; China reacciona con condena. 

Implicaciones

La disuasión en el Estrecho no se sostiene con comunicados. Se sostiene con capacidad, munición, resiliencia social y claridad política. Para Europa, es un aviso: si el Indo-Pacífico se desestabiliza, el coste llegará a nuestros puertos en forma de inflación, escasez y crisis industrial.

 

7. China afloja con una mano y aprieta con la otra: licencias “rápidas” para tierras raras

Hechos

Pekín confirma que empieza a emitir licencias generales para agilizar exportaciones de tierras raras, esenciales para automoción y alta tecnología; la UE dice que hay informes, pero sin claridad plena sobre beneficiarios. 

Implicaciones

La lección es elemental: la dependencia no se negocia, se paga. Hoy acelera; mañana frena. Si Europa no reduce su exposición, seguirá siendo rehén de un sello administrativo emitido en Pekín.

 

8. China regulará exportaciones de acero con licencias desde 2026

Hechos

China introduce un sistema de licencias de exportación para unos 300 productos siderúrgicos desde 2026 para monitorizar exportaciones y fricciones comerciales, alegando alineación con normas de la OMC. 

Implicaciones

Esto no es “tecnicismo”: es política industrial defensiva y ofensiva a la vez. La sobrecapacidad china presiona mercados; el mundo responde con barreras; Pekín perfecciona el control. Europa debe fortalecer su industria —sin complejos— si no quiere convertirse en museo con regulaciones impecables y fábricas cerradas.

 

9. El “proyecto Manhattan” chino para chips: avances en EUV, pero aún lejos del monopolio occidental

Hechos

Una investigación describe un esfuerzo estatal chino para desarrollar litografía EUV: un prototipo operativo que genera luz EUV, con objetivo oficial de chips propios avanzados para 2028 (fuentes sugieren más cerca de 2030). 

Implicaciones

Las sanciones ralentizan, pero no anulan. China juega a largo plazo, con recursos de Estado, y con un objetivo evidente: independencia tecnológica con proyección militar e industrial. Occidente sólo puede responder con inversión seria, alianzas, y protección de cadenas críticas.

 

10. UE-Mercosur se atasca: Francia no está lista; Brasil lo presenta como prioridad geopolítica

Hechos

Macron reitera que Francia no está preparada para firmar el acuerdo, alegando reciprocidad y controles más estrictos; Brasil insiste en que el pacto es una prioridad geopolítica y lamenta el retraso en la firma. 

Implicaciones

Europa se equivoca de enemigo: el inmovilismo abre espacio a China en Iberoamérica. Salvaguardas sí; bloqueo por reflejo, no. Mercosur es geopolítica, no sólo aranceles.

 

11. Rivalidad EE. UU.-China: geoeconomía, oro y tecnología

Hechos  

Los análisis macroeconómicos del cierre de 2025 apuntan a un “aterrizaje suave” global: crecimiento razonable, recortes adicionales de tipos de interés y resiliencia del comercio pese a las amenazas de tarifas, aunque con serios riesgos a medio plazo por el sobreendeudamiento público.

La geoeconomía se consolida como herramienta central de la rivalidad Estados Unidos–China, con tensiones en torno a cadenas de suministro, control tecnológico y uso de los metales preciosos y las materias primas estratégicas como instrumentos de poder.

Implicaciones 

Un mundo fragmentado en bloques comerciales y tecnológicos favorece a las autocracias organizadas que saben jugar con la dependencia de las cadenas de suministro; por eso, la respuesta no puede ser el proteccionismo indiscriminado, sino una estrategia inteligente de diversificación, resiliencia industrial y defensa del comercio libre pero no ingenuo.

El expansionismo chino en Asia, el Indo‑Pacífico y África no se combate con declaraciones solemnes, sino con presencia económica, acuerdos de inversión sólidos, seguridad marítima creíble y una alianza transatlántica que recupere ambición estratégica; de lo contrario, Pekín seguirá comprando silencios y voluntades a golpe de crédito y de infraestructuras.

 

12. India se consolida como pivote indoatlántico

Hechos  

India y Omán han firmado un Acuerdo de Asociación Económica Integral que refuerza la presencia india en el Golfo y consolida a este país como actor clave en la conectividad comercial y energética entre Asia, Oriente Medio y África.

El pacto se produce en un contexto en el que Nueva Delhi equilibra sus relaciones con Washington y Moscú, mientras se posiciona como alternativa a la hegemonía china en Asia.

Implicaciones 

La consolidación de India como potencia indo‑atlántica ofrece una oportunidad extraordinaria para Occidente de forjar un eje democrático de contrapeso a China, siempre que se asuma a Nueva Delhi como socio con intereses propios, no como mero “aliado júnior”.

Para Europa y para España, la lección es obvia: quien llegue tarde a este nuevo mapa de alianzas quedará relegado a la irrelevancia; el vacío no lo llenan las buenas intenciones ni los discursos europeístas, sino la inversión, la presencia diplomática de alto nivel y la capacidad de ofrecer alternativas reales a la influencia china y rusa.

 

III. RACK DE MEDIOS

Reuters 

Marca el día con tres ejes: (1) la decisión europea de financiar a Ucrania con endeudamiento conjunto, dejando el uso directo de activos rusos para más adelante; (2) la intensificación de la guerra energética rusa y la respuesta ucraniana con drones; (3) el giro Indo-Pacífico (Taiwán) y el pulso industrial con China (tierras raras, acero, chips). 

The Washington Post / The Guardian (Taiwán como línea roja estratégica)

Ambos subrayan el tamaño récord del paquete, la lógica de disuasión y el impacto directo en la relación con Pekín. 

Al Jazeera y prensa regional (Venezuela / guerra y narrativa)

Al Jazeera recoge el “bloqueo” a petroleros sancionados y lo enmarca en escalada política; Reuters aporta el dato operativo de exportaciones y “flota en la sombra”. 

Asharq Al Awsat y circuito árabe (Gaza: alerta humanitaria operativa)

Reproducen la advertencia de ONU/ONG sobre cierres por registro y el impacto sobre servicios esenciales. 

Straits Times / ecos asiáticos (UE–Ucrania y el debate de activos)

Recogen el pulso europeo sobre financiación y el papel de los depositarios, con foco en el riesgo legal y político. 

Japan Times / prensa económica asiática (chips y “proyecto Manhattan”)

Amplifican el relato del salto tecnológico chino, con la lectura estratégica: sanciones sí, pero carrera estructural en marcha. 

Xinhua (acero: encuadre regulatorio y legitimación)

Presenta el sistema de licencias como gestión “normal” y compatible con reglas; Reuters aporta el contexto de fricciones comerciales globales. 

 

IV. SEMÁFORO DE RIESGOS

Nivel

Riesgo

Lectura operativa

🔴

Ucrania–Rusia

Guerra energética + drones: escalada sostenida y desgaste civil.

🔴

Gaza

Riesgo de colapso humanitario-operativo y efecto de radicalización.

🟠

UE (cohesión estratégica)

Endeudamiento conjunto desbloquea fondos, pero la unidad se paga con “excepciones”.

🟠

Estrecho de Taiwán

Paquete récord aumenta disuasión y también fricción con Pekín.

🟠

Cadena de suministro (tierras raras / acero / chips)

China perfecciona palancas: licencias, control y sustitución tecnológica.

🟠

Venezuela

Presión útil si es sostenida; riesgo de respuesta asimétrica del régimen y de sus aliados.

 

 V. COMENTARIO EDITORIAL

Europa ha hecho lo imprescindible —poner dinero—, pero no lo decisivo —poner carácter—. El endeudamiento conjunto para Ucrania es una buena noticia inmediata, pero no puede convertirse en coartada para seguir aplazando la medida más justa: que el agresor pague. Si Rusia entiende que la amenaza de litigios y represalias basta para frenar a la UE, lo que hoy es presión legal mañana será presión militar.

Mientras tanto, en Ucrania se libra la batalla real: Moscú golpea la electricidad para quebrar la voluntad; Kiev golpea la logística rusa para demostrar que la guerra no es un espectáculo televisado desde Moscú. Y nosotros, Occidente, debemos elegir entre dos opciones: ser aliados fiables o ser comentaristas sofisticados de la tragedia.

En Gaza, la advertencia de ONU y ONG no puede ser tratada como ruido. El terrorismo de Hamás es una realidad; el derecho de Israel a defenderse también. Pero la asfixia administrativa de la ayuda —si desemboca en cierre— no trae seguridad: trae odio, caos y un futuro peor. La eficacia estratégica exige fuerza y control, sí, pero también gobernanza y humanidad operativa.

Y en Asia, la gran verdad vuelve a imponerse: China juega con palancas materiales y tecnológicas; Estados Unidos responde con disuasión militar; Europa no puede limitarse a regular su decadencia. Si queremos seguir defendiendo libertades, prosperidad y dignidad humana, habrá que dar prioridad a industria, defensa, alianzas y soberanía tecnológica. Lo demás es retórica para tiempos cómodos, y éstos ya han terminado.