Claves del día de Jose Antonio Vizner
Hoy me levanto con la misma incertidumbre que parece inundar los mercados financieros. El S&P500 apenas respira, el Nasdaq sigue ligeramente en negativo, y el miedo se instala entre los inversores. Donald Trump, una vez más, deja la puerta abierta a una recesión, lo que aumenta las dudas y refuerza la ansiedad del mercado. Desde su círculo cercano, se empieza a instalar la idea de que, quizás, esta recesión es inevitable, fruto de un crecimiento económico artificial basado en el gasto público. ¿Es esta la corrección que necesitaba Estados Unidos para volver a una economía “real”?
Es curioso observar cómo, después del fuerte golpe de ayer, las caídas de hoy son moderadas. Uno esperaría un rebote, pero la volatilidad crece y el inversor empieza a entrar en pánico. En tiempos de incertidumbre, los refugios clásicos toman protagonismo: el oro y la plata suben, anticipando una posible estanflación. Bitcoin, por su parte, recupera los 80.000 dólares tras una jornada complicada, mostrando que, aunque muchos siguen sin entender su rol, hay quienes lo ven como un refugio en momentos de turbulencia.
La gran pregunta es si la administración Trump se está adelantando a la caída y sabe algo que nosotros no. En su entrevista con FOX, el presidente dejó claro que su prioridad es construir “un país fuerte”, minimizando la importancia del mercado de valores. Esto puede interpretarse de muchas maneras, pero la lectura que muchos hacen es que la recesión no es solo una posibilidad, sino algo que ya está en camino.
Si miramos a Washington D.C., hay señales que preocupan: el desempleo aumenta y la venta de viviendas también. Bank of America, en un informe reciente de Michael Hartnett, sugiere que la primera mitad de 2025 podría no verse afectada por recortes arancelarios o cambios en la política migratoria, pero advierte de una disminución de la confianza del consumidor. En otras palabras, la recesión podría estar a la vuelta de la esquina. ¿Si es así, cómo se explican las recientes decisiones de Trump? El mercado no entiende y responde con ansiedad, disfrazada de volatilidad.
Mientras tanto, el panorama internacional sigue siendo un juego de ajedrez. Ucrania intenta negociar un alto el fuego por mar y aire con Estados Unidos y Marco Rubio en su visita a Arabia Saudí. Volodimir Zelensky insiste en que Ucrania siempre ha buscado la paz y que la responsabilidad del conflicto recae en Rusia. Pero, en un mundo donde la economía y la geopolitica van de la mano, las palabras y acciones de los líderes siguen marcando el rumbo de un futuro incierto.
Lo que es seguro es que el 2025 empieza con más preguntas que respuestas. Y yo, como muchos otros, sigo esperando señales claras en medio de este caos financiero.