“Rusia no ha dado una respuesta emocional a Ucrania porque no para de avanzar hacia Sumy”. Refoyo
Enrique Refoyo, experto en geopolítica y doctor en geografía militar, analiza en la escalada militar tras un ataque ucraniano contra bombarderos estratégicos rusos, considerado sin precedentes y que generó preocupación por una posible represalia nuclear, que no se ha materializado hasta ahora.
Refoyo argumenta que, a pesar del simbolismo del ataque ucraniano y la narrativa inicial sobre su magnitud, su impacto real fue limitado: sólo dos aviones rusos habrían sido destruidos y cinco más dañados. Subraya que para Rusia se trata de una provocación simbólica más que de una alteración estratégica en el frente. A pesar de estos ataques, las fuerzas rusas seguirían avanzando en varios puntos clave, incluyendo la región de Sumy, lo cual encaja con las declaraciones recientes de Putin sobre la creación de una zona de amortiguamiento en regiones fronterizas.