¿Se repite el guion de Irak en 2003? Esta es la alerta sobre la narrativa de armas nucleares en Irán
Diego Checa Hidalgo, profesor de historia contemporánea de la Universidad de Granada, enmarca el actual conflicto entre Irán e Israel dentro de una lucha histórica por la hegemonía regional en Oriente Medio. Israel, sostiene, ha perseguido desde hace décadas la superioridad militar y política no solo sobre los países árabes, sino también sobre actores no árabes de la región como Irán, al que percibe como su principal amenaza estratégica.
Desde hace años, el discurso oficial israelí ha identificado a Irán como su enemigo número uno. Esta enemistad se ha intensificado debido al apoyo iraní a actores regionales contrarios a las políticas de expansión israelí. El profesor destaca que Israel ha desarrollado capacidades militares para atacar directamente territorio iraní, y que cuenta con el respaldo político y militar de Estados Unidos, lo cual le otorga una posición de ventaja para llevar a cabo operaciones prolongadas.
Sobre la escalada reciente, Checa advierte que no se trata de una ruptura histórica drástica, sino de una intensificación cualitativa de una política hostil ya existente. Aunque Israel ya había emprendido acciones encubiertas como sabotajes y asesinatos selectivos, ahora ha optado por ataques directos. La participación estadounidense no sorprende, ya que históricamente ha protegido a Israel, incluso ante posibles crímenes de agresión. El paralelismo con la invasión de Irak en 2003 es claro: se utilizan acusaciones de desarrollo de armas de destrucción masiva sin pruebas concluyentes como justificación para la agresión.