Trump advierte que China no puede salirse con la suya: el gran impacto por los aranceles
Donald Trump ve posible un acuerdo con China en tres semanas. El secretario de Estado de EEUU, Scott Bessent, ha reconocido ya que los aranceles elevados propuestos por Trump son insostenibles. La administración Trump se centra ya en la desescalada de la guerra comercial contra el gran hegemónico de China. En un contexto, donde Tesla ha vuelto a subir, después del batacazo del inicio de semana. Una subida que viene impulsada por el mensaje de su CEO, Elon Musk, de que dedicará más tiempo a su empresa reduciendo el tiempo invertido en el gobierno de Donald Trump.
Financial Times recoge que las fábricas chinas reducen la producción y envían a los trabajadores a casa ante el impacto de los aranceles impuestos por Donald Trump. Siendo así, los propietarios afirman que los clientes estadounidenses han cancelado o suspendido los pedidos, debido a la tasa de los aranceles. China está previendo lo que puede pasar en plena guerra comercial con EEUU.
Los mercados asisten a la desescalada comercial, en discurso, porque aún queda mucho por negociar entre Donald Trump y Xi Jinping. El Hang Seng de Hong Kong se relaja y el índice Nikkei sube un 0,5%. En futuros, el SP500 cae un 0,47%, el Nasdaq un 0,59% y el Dow Jones un 0,42% abajo. Pendientes de cómo se mueven las divisas, el oro y las materias primas. El dólar retrocede y el eurodólar sigue en alza, pero más lento.
Donald Trump ha insistido en que EEUU “no va a perder más dinero en el comercio”, explicando que el país perdía dos billones de dólares al año en comercio internacional. “Todos los países quieren participar, incluso los que nos han estafado muchos años, no solo China, sino también la Unión Europea”, ha explicado Trump.
El jefe del Tesoro, Scott Bessent también ha señalado que China se va a dar cuenta que necesita un cambio económico que a veces necesita un empujón externo, que debe llegarle a China por parte de EEUU. Siendo una gran oportunidad si se consigue el acuerdo entre las dos grandes potencias. “China necesita un reequilibrio, los datos muestran que la economía se está alejando del consumo hacia la manufacturera”, ha insistido Scott Bessent.
No obstante, Bessent ha reconocido que el ascenso de China ha sido “rápido e impresionante”. Así, ha afirmado que EEUU acoge con beneplácito a China. Un mensaje que llega en plena pausa de noventa días de Trump de los aranceles recíprocos.