“Trump tiene razón. Ucrania sería aplastada por Rusia en unos meses”. Armesilla
Santiago Armesilla, Rector del Instituto Beatriz Galindo – La Latina, plantea que las declaraciones de Donald Trump sobre su papel en el conflicto entre Rusia y Ucrania tienen un fuerte componente propagandístico. La crítica se centra en que, pese a la percepción de que Rusia tenía la guerra prácticamente ganada, no logró sus metas estratégicas más ambiciosas, como tomar Kiev o cruzar el Dniéper. Esto sugiere que la asistencia occidental, especialmente la liderada por Estados Unidos bajo la administración Biden, tuvo un impacto real en frenar los avances rusos. Armesilla, sin embargo, también reconoce el discurso de Trump, quien argumenta que su política exterior habría evitado un conflicto de mayor escala.
Eduardo Irastorza, profesor OBS Business School, señala que Ucrania se enfrenta a un declive progresivo de apoyos, tanto por la reticencia de figuras como Donald Trump como por la insuficiencia estructural de Europa para sostener el esfuerzo bélico. Irastorza también sugiere que EE.UU. no actúa únicamente por razones altruistas o democráticas, sino que tiene intereses económicos claros en Ucrania, especialmente en sus recursos minerales estratégicos. Esta doble agenda haría que la ayuda estadounidense no sea tan fiable como parece, especialmente si su liderazgo muestra indecisión o falta de compromiso.
Carlos Teissier, experto en geopolítica, destaca que cualquier implicación de Trump en el conflicto no responde a una estrategia diplomática ni a un interés geopolítico profundo, sino a un cálculo de beneficio personal Esta perspectiva descarta la posibilidad de que Trump haya tenido un impacto sustancial o constructivo en la evolución del conflicto, sugiriendo que su narrativa como “pacificador” es más un ejercicio de marketing político que una contribución real. El comentario también establece una diferencia entre Trump como figura individual y EE.UU. como actor estatal, una distinción importante que recalca el carácter personalista y egocéntrico que, según Teissier, define las acciones del expresidente.