MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
Vodafone prevé que para 2030 existan espejos que detectan enfermedades o dispositivos ‘wearables’ conectados con el pensamiento, según se recoge en su informe ‘El consumidor conectado 2030’.
El estudio publicado junto a The Future Laboratory y que se ha presentado este martes se centra en cinco tendencias que cambiarán la vida cotidiana y buscarán dar respuestas a desafíos como el cambio climático.
Así, la compañía cree que habrá dispositivos inteligentes, como los mencionados espejos, que ayudarán a prevenir enfermedades y evitar así la saturación del sistema sanitario controlando, en este caso, los cambios en el color de la piel o el flujo sanguíneo.
Otro de los puntos que pronostica el informe es el control “mental” de los dispositivos, cuyos primeros pasos para hacerlo posible ya se están dando por ejemplo en Neuralink, una ‘startup’ fundada por Elon Musk.
Otro de los aspectos a los que hace alusión el texto es la naturaleza conectada, mediante la cual la conectividad se incorporará a los árboles, praderas u océanos y se podrá evaluar amenazas o medir el impacto de planes de regeneración.
Del mismo modo, la extensión de ciudades inteligentes permitirá un uso más eficiente de la energía y se apostará por decisiones con menor impacto medioambiental.
El texto también hace alusión a la llegada del vehículo autónomo, una innovación que junto a las ciudades inteligentes podría tener un impacto en el PIB de la conectividad de 241.000 millones de euros en 2030.
Además de los beneficios ecológicos y de seguridad de estos vehículos, Vodafone predice la existencia de hologramas inmersivos, permitirán a las marcas de comercio electrónico mostrar sus últimas colecciones a los pasajeros mientras viajan.
Asimismo, estos podrán adquirir los productos con sus datos personales, que se convertirán en una forma de moneda, algo para lo que España ha dado los primeros pasos al autorizar el pago con datos personales en la nueva ley de consumidores.
El director general de Vodafone Smart Tech, Lutfu Kitapchi, ha destacado que la conectividad se ha convertido en el “tejido de la vida cotidiana” en los dos últimos años.
“Las conclusiones del informe ‘The Connected Consumer 2030’ ponen de manifiesto cómo está creciendo el ritmo de la transformación y cómo nos situaremos en el centro de la misma con nuestras soluciones de conectividad para ayudar a los gobiernos, las empresas y los consumidores a afrontar los principales retos de la sociedad”, recalca.
