Netflix se hunde en Wall Street porque no ha ganado el dinero que los brokers esperaban
La euforia de los mercados estadounidenses vivió un frenazo este miércoles después de que Netflix publicara unos resultados trimestrales más débiles de lo previsto, provocando una caída del 6 % en sus acciones durante el after hours. El gigante del streaming, que había mantenido un sólido crecimiento durante el último año, sorprendió negativamente a los analistas con unos beneficios por acción de 5,87 dólares, lejos de los 6,97 dólares estimados por el consenso del mercado.
Aunque los ingresos alcanzaron los 11.510 millones de dólares, en línea con lo esperado, la compañía reconoció que su rendimiento se vio afectado por un conflicto fiscal en Brasil, país clave dentro de su expansión internacional. Este problema tributario ha lastrado sus cuentas y generado incertidumbre entre los inversores sobre su impacto futuro en la rentabilidad global del grupo.
Un tropiezo en pleno auge de la competencia
La caída bursátil llega en un momento delicado para Netflix, que enfrenta una competencia cada vez más feroz por parte de Disney+, Amazon Prime Video, HBO Max y Apple TV+, entre otros.
La compañía ha apostado en los últimos meses por ampliar su oferta de contenido local, introducir planes con anuncios y combatir el uso compartido de cuentas, medidas que habían impulsado suscriptores y beneficios durante el primer semestre del año.
Sin embargo, los resultados del tercer trimestre muestran que el crecimiento no es tan sólido como parecía. Los inversores esperaban una mayor rentabilidad tras el endurecimiento de las políticas de acceso y la subida de precios en varios países, pero el beneficio operativo no ha acompañado al ritmo de ingresos.
El mercado premia a otras compañías y castiga al streaming
Mientras Netflix se desplomaba en el mercado fuera de horas, otras grandes corporaciones como Intuitive Surgical y Coca-Cola celebraban resultados mejores de lo esperado.
El optimismo general llevó al Dow Jones a rozar los 47.000 puntos, su máximo histórico, aunque el Nasdaq —índice donde cotizan las tecnológicas— cerró con ligeras caídas debido al retroceso de valores como Netflix y otras firmas del sector.
La caída de la plataforma de streaming también arrastró momentáneamente a otros valores del entretenimiento, reflejando el nerviosismo de los inversores ante los signos de desaceleración en el consumo digital.
Lo que viene: nuevas pruebas para los gigantes tecnológicos
Pese al tropiezo de Netflix, los analistas se mantienen atentos a una nueva oleada de resultados empresariales que podría marcar la tendencia del mercado en los próximos días.
Tesla será la próxima gran tecnológica en presentar sus cifras, iniciando la esperada ronda de informes del grupo conocido como los “Magnificent Seven”, que incluye a Apple, Microsoft, Meta, Alphabet, Amazon y Nvidia.
Según Alicia Levine, jefa de estrategia de inversión de BNY Wealth, el comportamiento de estas compañías será clave para determinar si la rally bursátil actual puede prolongarse:
“Si los beneficios superan las expectativas y las tecnológicas confirman la solidez del negocio ligado a la inteligencia artificial, el mercado podría tener un nuevo impulso al alza.”
Inflación y tipos: los otros factores que marcarán el rumbo
Además de la temporada de resultados, el foco de los inversores estará puesto en el índice de precios al consumidor (CPI) de septiembre, que se publicará este viernes. Este dato será determinante para la Reserva Federal (Fed), que se espera anuncie una nueva bajada de tipos de interés en su próxima reunión de octubre o diciembre.
Por ahora, el mercado sigue dividido entre la euforia de las grandes corporaciones y la preocupación por los datos macroeconómicos. Y en medio de esa tensión, Netflix ha pasado de ser protagonista del optimismo tecnológico a símbolo de las dudas del sector, al menos por un trimestre.