JP Morgan lanza su primer fondo monetario tokenizado… y lo hace en Ethereum

Mañana se abrirá el My OnChain Net Yield Fund, conocido como «MONY», el primer FMM tokenizado de JP Morgan, el mayor banco del mundo por capitalización, y uno de los primeros grandes vehículos de liquidez bancaria que “salta” íntegramente a una blockchain pública. Según la propia gestora, el fondo se estructura como una colocación privada 506(c) y estará disponible solo para inversores cualificados, con un mínimo de entrada de 1 millón de dólares y requisitos de patrimonio de al menos 5 millones para particulares y 25 millones para instituciones, lo que lo sitúa claramente en la liga alta del mercado institucional. El lanzamiento llega ya sembrado con 100 millones de capital propio de JP Morgan, una forma de dar volumen inicial y credibilidad al producto desde el día uno.

Las participaciones del fondo se emitirán como tokens sobre la red pública de Ethereum, apoyadas en la plataforma de tokenización Kinexys Digital Assets, la solución multichain interna del banco para llevar activos tradicionales al entorno on-chain. El mensaje oficial es que los clientes institucionales muestran un “fuerte interés en la tokenización”, tanto para optimizar tesorería como para utilizar estos activos tokenizados en esquemas de colateral y financiación más flexibles. MONY se integra, además, en la plataforma Morgan Money, el hub de liquidez institucional de JP Morgan, de forma que para el cliente el salto a Ethereum se “esconde” tras una interfaz ya conocida.

Con este movimiento, JP Morgan se suma a la senda ya abierta por BlackRock, Franklin Templeton y Fidelity, que han desplegado sus propios fondos monetarios tokenizados o versiones on-chain de vehículos de tesorería en redes como Ethereum y Avalanche. BlackRock ha superado ya los 2.900 millones de dólares en su fondo BUIDL; Franklin Templeton acumula más de 380 millones en su fondo gubernamental tokenizado; y el volumen total de Treasuries y MMF tokenizados rondaba los 7.400 millones a mitad de 2025, tras crecer en torno a un 80% en el año. Fidelity, por su parte, ha registrado una versión tokenizada de su fondo monetario en Ethereum. Todo ello consolida una tendencia clara: la conversión de activos tradicionales en “real world assets” on-chain se está convirtiendo en una de las nuevas fronteras competitivas de Wall Street.

Transparencia, 24/7 y puente con DeFi

Según la información facilitada por el propio banco y recogida por varios medios especializados, MONY promete combinar el perfil clásico de un fondo monetario institucional con ventajas operativas propias del ecosistema cripto. Por un lado, la tokenización en Ethereum permite una trazabilidad completa de las posiciones y movimientos: cada participación existe como un token identificable en cadena, lo que facilita reconciliaciones, auditoría y reporting casi en tiempo real.

En cuanto a la operativa, la idea es acercarse a un modelo de liquidación casi instantánea y operativa 24/7, al no depender de los horarios de las cámaras de compensación tradicionales. Las órdenes de suscripción y reembolso podrán cursarse tanto en dólares como en USDC, el ‘stablecoin’ referenciado al dólar, de manera que un cliente puede moverse de efectivo bancario a activo on-chain y viceversa con menos fricción, manteniendo en todo momento exposición a instrumentos de Tesoro estadounidense a corto plazo y repos respaldados por Treasuries, que son la base de la cartera del fondo.

La gran novedad estratégica es que estas participaciones tokenizadas no solo representan una posición pasiva de tesorería, sino que están pensadas para usarse como colateral en entornos digitales: desde la propia infraestructura institucional de JP Morgan hasta mercados y protocolos DeFi compatibles, donde puedan servir como garantía en préstamos, financiación o estructuras de liquidez. La gestora subraya que el objetivo es ofrecer a los clientes “rendimiento en dólares directamente en blockchain”, de forma que no tengan que elegir entre mantener stablecoins o tener su liquidez invertida: el mismo token aspira a cumplir ambas funciones.

MONY reproduce el esquema tradicional de un fondo monetario de alta calidad y bajo riesgo, pero desplaza el registro de propiedad, la negociación y parte de la gestión operativa al entorno on-chain. Para JP Morgan, supone el primer gran experimento público en Ethereum con un producto de tesorería “core”; para el mercado, una señal clara de que la tokenización de liquidez institucional ha dejado de ser un concepto teórico para convertirse en producto comercial.