El Dow Jones abre en verde y tira de Wall Street mientras la Fed insinúa un giro en diciembre
Las bolsas de Estados Unidos han abierto este lunes en positivo, con los inversores tratando de estabilizar el sentimiento al inicio de una semana más corta por Acción de Gracias. El tono lo marcan dos factores: una agenda de negociación reducida y la esperanza de que la Reserva Federal pueda empezar a relajar su política monetaria tan pronto como en diciembre.
Wall Street ha arrancado la sesión con compras generalizadas, en un contexto en el que muchos gestores aprovechan la semana de Acción de Gracias para ajustar carteras sin grandes movimientos de volumen. Al inicio de la jornada, el Dow Jones subía en torno a un 0,25% (unos 115 puntos), mientras que el S&P 500 avanzaba cerca de un 0,88%. El mayor impulso llegaba desde el Nasdaq 100, que repuntaba alrededor de un 1,43%, reflejando un renovado apetito por los valores tecnológicos de gran capitalización.
El clima de mercado está condicionado por las señales lanzadas por varios miembros de la Reserva Federal, que han abierto la puerta a un posible cambio de sesgo en la reunión de diciembre. Aunque aún no hay consenso cerrado, el mensaje que se lee en los parqués es claro: la fase más agresiva del ciclo de tipos podría estar tocando techo y, a partir de ahora, el debate girará más en torno a cuándo y cómo llegará la primera bajada del precio del dinero que a nuevos endurecimientos.
La combinación de un posible giro de la Fed y una semana más corta en Wall Street —con el mercado cerrado el jueves por Acción de Gracias y media sesión el viernes— favorece un tono algo más constructivo en renta variable, al menos en el arranque. Muchos inversores optan por mantener posiciones, reducir volatilidad y esperar a que pase un tramo del calendario dominado por datos de consumo y ventas minoristas ligadas al Black Friday y al Cyber Monday.
En el mercado de divisas, el euro avanzaba alrededor de un 0,12% frente al dólar, hasta la zona de los 1,1531 dólares a las 9:28 horas ET, movimiento que encaja con un billete verde algo más débil ante la expectativa de una Fed menos dura y una Europa que, de momento, mantiene un discurso de tipos altos por más tiempo.
Con este punto de partida, la semana se perfila como un periodo de transición: menos volumen, más foco en pistas sobre la política monetaria estadounidense y máxima atención a los datos de consumo que marcarán el tono de la recta final del año en Wall Street.
