El Dow Jones y el S&P 500 podrían romper resistencias clave tras la caída impulsada por China
El cierre de ayer en Wall Street dejó claro que la volatilidad sigue dominando el mercado. La combinación de tensiones entre Estados Unidos y China y el flujo de resultados empresariales dispares generó un retroceso repentino en los índices, aunque los analistas técnicos coinciden en que la caída podría haber sido una oportunidad de entrada para los compradores más atentos.
El foco de los analistas vuelve a situarse hoy en los niveles de soporte y resistencia que determinarán el próximo movimiento de los grandes índices bursátiles.
$DJIA: ¿una trampa bajista con potencial alcista?
El Dow Jones Industrial Average cerró la jornada anterior con una caída rápida impulsada por el sentimiento negativo proveniente del frente geopolítico. Sin embargo, el índice mantiene una estructura técnica que sugiere un posible rebote si logra superar los niveles de resistencia clave.
El primer nivel de resistencia importante se sitúa en los 46.600 puntos. Una ruptura sostenida por encima de este nivel confirmaría la intención de los toros de recuperar el control y abriría la puerta a una prueba del siguiente umbral, los 46.800 puntos.
“Si el Dow logra romper los 46.800, el camino hacia los 47.000 puntos quedará despejado”, señalan los analistas técnicos. A partir de ese punto, el movimiento podría extenderse hacia el objetivo principal de los 50.000 puntos, una marca ambiciosa pero plausible si mejora el entorno macroeconómico.
En cuanto al soporte, los niveles a vigilar son 46.500 y 46.400 puntos.
$SPY: Tesla impulsa la confianza, pero la volatilidad manda
El S&P 500 ETF ($SPY), principal referencia del sentimiento del mercado, experimentó una corrección de entre 3 y 4 dólares, mientras los inversores digerían las noticias desde China. No obstante, las buenas cifras de ganancias de Tesla ($TSLA) aportaron un respiro al sentimiento general y favorecieron el rebote de los futuros durante la sesión nocturna.
El nivel de resistencia inmediata se podría encontrar en los 668 dólares. Si la apertura se mantiene por encima o el precio logra consolidarse en esa zona, el siguiente objetivo será 673 dólares, un nivel psicológico importante que podría dar paso a un impulso hacia 690 dólares.
El objetivo principal del movimiento apuntan los analistas a 700 dólares, una zona donde el ETF podría enfrentar presión vendedora significativa, especialmente si los datos económicos continúan mostrando señales mixtas.
En el lado bajista, el soporte técnico clave se mantiene en 665 y 663 dólares.
La jornada de hoy podría ser decisiva para definir el tono del resto de la semana. La combinación de ganancias corporativas sólidas y el enfriamiento de las tensiones geopolíticas podría ofrecer el escenario perfecto para una recuperación sostenida.
Sin embargo, la cautela sigue siendo la norma. Las señales técnicas apuntan a que la sesión podría comenzar con un gap alcista, pero la volatilidad reciente invita a no confiarse. Como apuntan los analistas, “el mercado está atrapando a los bajistas una y otra vez”, y la sesión del 23 de octubre podría ser otro ejemplo de ello.
