Futuros de Wall Street se mantienen estables mientras los inversores miran a Tesla y a la política de tipos de la Reserva Federal
Los principales índices de futuros en Estados Unidos comenzaron el miércoles sin grandes movimientos, en una jornada marcada por la expectativa ante los resultados trimestrales de Tesla y otros gigantes tecnológicos. Los mercados permanecen atentos a nuevos datos económicos, especialmente los relacionados con las solicitudes de hipotecas, que podrían ofrecer pistas sobre los próximos pasos de la Reserva Federal en materia de política monetaria.
Los futuros del Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq 100 se mantenían planos a media mañana, reflejando la cautela de los inversores ante un contexto macroeconómico incierto y la cercanía de la temporada alta de resultados empresariales. A las 10:10 a.m. ET, los tres principales indicadores registraban variaciones mínimas, mientras los operadores aguardaban los datos de vivienda y los reportes financieros del sector tecnológico.
Tesla, uno de los valores más vigilados de la jornada, presentará sus resultados después del cierre de los mercados. La compañía de Elon Musk, que ha enfrentado un año de volatilidad por la caída en las ventas globales y la presión de los fabricantes chinos, busca convencer a los analistas de que su estrategia de expansión en inteligencia artificial y conducción autónoma puede sostener su crecimiento. Las estimaciones del consenso de mercado prevén una ligera contracción en los márgenes de beneficio, aunque con ingresos totales al alza respecto al trimestre anterior.
Además de Tesla, otras grandes tecnológicas como IBM y Meta también divulgarán sus resultados esta semana, lo que podría marcar el rumbo del Nasdaq y del sentimiento inversor en el corto plazo. “El mercado está en un punto de pausa, esperando una confirmación de que las valoraciones actuales pueden sostenerse en un entorno de tipos elevados”, explicó a Bloomberg Michael Arone, estratega jefe de inversiones de State Street Global Advisors.
En el plano macroeconómico, los inversores siguen de cerca las cifras de solicitudes de hipotecas en Estados Unidos, que podrían ofrecer una lectura más clara sobre la salud del mercado inmobiliario. Un descenso en las tasas de interés de largo plazo podría impulsar la demanda, aunque la Reserva Federal ha insistido en mantener la cautela. Según analistas de Goldman Sachs, “los próximos datos de inflación y empleo serán determinantes para calibrar el momento del primer recorte de tipos, que el mercado anticipa para comienzos de 2026 si la tendencia desinflacionaria se mantiene”.
En el frente cambiario, el euro se mantenía estable frente al dólar a las 4:18 a.m. ET, cotizando en 1,1590 USD, en línea con el comportamiento lateral de la divisa europea durante las últimas semanas. La calma cambiaria refleja, según analistas de ING, “una expectativa de convergencia de políticas monetarias entre la Fed y el Banco Central Europeo, con ambos bancos moviéndose hacia una fase de estabilidad antes de relajar condiciones financieras”.
Mientras tanto, los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años rondaban el 4,2 %, nivel que sigue marcando el pulso del apetito de riesgo en los mercados. Un descenso sostenido en ese rendimiento podría dar oxígeno a la renta variable, especialmente en sectores de alto crecimiento como el tecnológico y el inmobiliario.
En suma, el mercado estadounidense afronta la jornada con prudencia. Con las ganancias corporativas en el punto de mira y la política monetaria aún en debate, los inversores optan por la cautela antes de tomar posiciones significativas. Las próximas sesiones estarán marcadas por las cifras de Tesla, Meta y los nuevos datos macroeconómicos, que podrían determinar si Wall Street mantiene su estabilidad o entra en una nueva fase de volatilidad.