El IBEX 35 frena en seco en los 16.000 puntos tras la tregua Trump-Xi y el efecto Amazon
Tras una racha histórica que llevó al selectivo español a superar los 16.000 puntos, el IBEX 35 abre la sesión del viernes con signos de cansancio. La tregua comercial entre Estados Unidos y China, los resultados espectaculares de Amazon y el pulso de los bancos centrales marcan una jornada decisiva para medir si el rally tiene todavía gasolina para continuar.
El IBEX 35 ha decidido levantar el pie del acelerador. Después de una semana de vértigo, en la que el selectivo madrileño tocó máximos históricos impulsado por el optimismo global, la jornada del viernes amaneció con leves subidas y una sensación general de pausa. A las 08:23 GMT, el índice avanzaba apenas un 0,06%, hasta los 16.049 puntos, mientras el FTSE Eurofirst 300 retrocedía un 0,21%, reflejando un ánimo más prudente entre los inversores europeos.
Este nuevo clima de entendimiento internacional se suma al impulso de los gigantes tecnológicos en Wall Street. Amazon sorprendió con unos resultados que dispararon su valor un 13% tras el cierre, sumando más de 300.000 millones de dólares a su capitalización bursátil. Apple también aportó optimismo con previsiones sólidas de ventas del iPhone, mientras Meta y Microsoft sufrían por la presión de su inversión en inteligencia artificial. El mercado observa ahora con expectación los próximos resultados de Nvidia, la primera compañía que ha superado la marca de los 5 billones de dólares en capitalización.
En el frente monetario, la Reserva Federal y el Banco Central Europeo cumplieron con el guion. Jerome Powell enfrió el entusiasmo de quienes apostaban por un nuevo recorte de tipos en diciembre, señalando que la inflación sigue lejos del objetivo, mientras el BCE mantuvo su tipo rector en el 2% por tercera reunión consecutiva. El dato de inflación de la eurozona, que se publicará a las 10:00 GMT, podría ofrecer una nueva pista sobre el margen de maniobra de Fráncfort: los analistas prevén una ligera moderación del 2,2% al 2,1%.
En España, el foco se mantiene sobre la temporada de resultados corporativos, que sigue dejando un panorama desigual. CaixaBank sube un 0,5% pese a haber reducido su beneficio un 8%, compensado con una recompra de acciones por 500 millones de euros. Unicaja se anota un 2% tras mejorar su beneficio trimestral un 5%, mientras Acerinox cae un 1,8% por cifras inferiores a las expectativas.
El gran protagonista de la sesión es Puig Brands, cuyas acciones vuelan un 9% después de presentar una facturación de 1.300 millones en el tercer trimestre y reafirmar sus previsiones para 2025. En la banca, el verde domina las pantallas: Santander sube un 0,4%, BBVA un 1,7%, Sabadell un 1,2% y Bankinter un 0,3%. En cambio, entre los pesos pesados no financieros, Telefónica (-1,2%) e Inditex (-0,27%) muestran cierta fatiga, mientras Iberdrola apenas avanza un 0,11% y Repsol retrocede un 0,5%.
Con el cierre semanal en positivo —una ganancia acumulada del 1,19%—, el IBEX 35 encadena su tercera semana consecutiva al alza. Pero los analistas ya advierten que el listón está más alto que nunca. “La sesión podría evolucionar desde una apertura débil hacia una recuperación gradual, apoyada en la inercia de Wall Street”, apuntan desde Bankinter.
La gran pregunta ahora es si el rally tiene cuerda para más o si el mercado español está entrando en una fase de consolidación. Con el viento a favor de los resultados empresariales y una tregua geopolítica en ciernes, los inversores miran con cautela al calendario de diciembre, donde las decisiones de Powell y Lagarde volverán a marcar el ritmo del mercado.