Wall Street cierra en rojo: la toma de beneficios y la corrección tech frenan al Dow Jones antes de Año Nuevo

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Las bolsas estadounidenses arrancan la última semana de 2025 con descensos moderados: el Dow Jones cayó un 0,51%, el S&P 500 un 0,35% y el Nasdaq un 0,50%, en una sesión marcada por toma de beneficios tras los máximos históricos recientes y por la corrección de los grandes valores tecnológicos y ligados a la inteligencia artificial.

El S&P 500 perdió 24,20 puntos hasta los 6.905,74, el Nasdaq Composite cedió 118,75 puntos hasta 23.474,35 y el Dow Jones Industrial Average retrocedió 249,04 puntos hasta los 48.461,93. Los índices cerraron lejos de los mínimos intradía, pero igualmente en negativo, en una jornada de bajo volumen típica de cierre de año, en la que muchos inversores aprovecharon para consolidar beneficios tras un tramo final de 2025 excepcionalmente alcista.

Toma de beneficios tras una semana brillante

El retroceso de este lunes se entiende, en buena parte, como un movimiento de “profit taking”: tras varios días de fuertes subidas, una parte del mercado optó por cobrar plusvalías antes de cerrar el ejercicio.

La semana previa, interrumpida por las festividades navideñas, había sido especialmente positiva:

  • El S&P 500 avanzó en torno a un 1,4%.

  • El Dow Jones y el Nasdaq sumaron cerca de un 1,2% cada uno.

El miércoles pasado, tanto el Dow como el S&P 500 firmaron máximos de cierre históricos, y el viernes sólo se registró una ligera toma de aire. Con ese telón de fondo, la corrección de este lunes encaja más con un ajuste técnico que con un giro brusco del ciclo.

El bajo volumen refuerza esa lectura: muchos operadores siguen fuera de las mesas a la espera del Año Nuevo, lo que amplifica los movimientos de los que sí están operando.

Tecnología e IA: del motor del rally al lastre del día

El peso de la caída volvió a recaer en los grandes nombres tecnológicos y ligados a la inteligencia artificial. El subíndice de informática y tecnología (S5INFT) cedió alrededor de un 0,45%, con:

  • Nvidia (NVDA) cayendo un 1,2%.

  • Palantir Technologies (PLTR) recortando un 2,4%.

  • Otros gigantes, como Oracle, registrando también descensos notables.

Pese al tropiezo, algunos gestores insisten en que no se trata del “principio del fin” para el liderazgo de la tecnología, sino de una oportunidad de compra tras un rally muy intenso. El argumento: excluyendo casos como Tesla, los grandes valores tech seguirían sin tener valoraciones desorbitadas si se comparan con su ritmo de crecimiento, sus ventajas competitivas y su fortaleza financiera.

Tesla (TSLA) fue uno de los valores más castigados de la sesión, con una caída del 3,3% tras haber marcado máximos históricos la semana anterior, lo que presionó al sector de consumo discrecional (S5COND).

Oro, mineras, aerolíneas y bancos: los grandes perdedores sectoriales

El retroceso no se limitó a la tecnología. El índice de Materiales (S5MATR) también cerró en negativo, muy afectado por el desplome de los metales preciosos. El oro y la plata, que venían de encadenar récords históricos —la plata llegó a superar los 80 dólares por onza—, sufrieron una corrección brusca al imponerse la toma de beneficios.

Las mineras de oro se llevaron la peor parte: el índice NYSE Arca Gold Bugs llegó a caer en torno a un 5,7% después de haber cerrado el viernes anterior en máximos.

También el sector de aerolíneas se vio bajo presión, con el NYSE Arca Airline Index retrocediendo alrededor de un 1,6%, en una sesión en la que se combinaron el ajuste de riesgo y la rotación hacia sectores más defensivos o ligados a materias primas.

En el frente financiero, los bancos hicieron una pausa tras un año muy fuerte. El subíndice bancario del S&P 500 retrocedió, y Citigroup —uno de los grandes ganadores de 2025 gracias a los avances para resolver sus problemas regulatorios— cayó cerca de un 1,9% en la sesión, aunque acumula una revalorización de aproximadamente un 68% en el año.

En el lado positivo, el sector energético (SPN) avanzó cerca de un 1%, impulsado por una subida del entorno del 2% en el precio del petróleo, en un contexto de tensiones geopolíticas en Oriente Medio y temores a posibles interrupciones de suministro.

Amplitud de mercado y renta fija: señales mixtas

En términos de amplitud, la sesión reflejó cierto deterioro:

  • En la NYSE, los valores en descenso superaron a los alcistas por un ratio de 1,63 a 1.

  • En el Nasdaq, esa relación fue de 2,38 a 1 a favor de las caídas.

Aun así, el S&P 500 registró 10 nuevos máximos de 52 semanas frente a sólo 2 nuevos mínimos, mientras que el Nasdaq sumó 37 máximos y 249 mínimos en ese horizonte. El volumen total negociado, de unos 13.080 millones de acciones, se situó claramente por debajo de la media de las últimas 20 sesiones (cerca de 16.200 millones), confirmando el tono de mercado festivo y con menos manos activas.

En el mercado de bonos, los Treasuries subieron —es decir, sus rentabilidades bajaron— después de una jornada anterior prácticamente plana. El rendimiento del bono a 10 años cayó alrededor de 2 puntos básicos, hasta el entorno del 4,11-4,12%, mientras que los tramos a 2 y 30 años también registraron ligeros descensos. El movimiento refleja un ajuste en las apuestas sobre los recortes de tipos de la Reserva Federal para el próximo año.

Datos macro: vivienda sorprende al alza

En el plano económico, el dato más relevante fue el de ventas de vivienda pendiente en EE.UU. Según la asociación de agentes inmobiliarios, el índice subió un 3,3% en noviembre, muy por encima del alrededor de 0,8% que esperaba el consenso, y tras un fuerte avance en octubre.

La cifra aporta aire a un sector dañado por la subida de tipos, y refuerza la narrativa de una economía que sigue mostrando resiliencia, incluso en segmentos sensibles al coste de la financiación.

Bolsas globales y el horizonte de 2026

Fuera de Estados Unidos, las bolsas ofrecieron un tono mixto:

  • En Asia-Pacífico, el Nikkei japonés cayó cerca de un 0,4%, el Shanghai Composite avanzó de forma casi imperceptible y el Kospi surcoreano se disparó en torno a un 2,2%, apoyado en el rally de los fabricantes de chips.

  • En Europa, el FTSE 100 británico cerró ligeramente en negativo, mientras que el DAX alemán y el CAC 40 francés subieron alrededor de un 0,1%.

Con solo unos días de negociación por delante, los tres grandes índices estadounidenses siguen en camino de cerrar 2025 con subidas de doble dígito y de encadenar su tercera ganancia anual consecutiva. El S&P 500 acumula alrededor de un 17% de avance en el año, impulsado por el entusiasmo en torno a la IA, la expectativa de relajación monetaria y la fortaleza del consumo y la inversión empresarial.

Muchos estrategas mantienen la previsión de nuevos avances en 2026. Como recordaba recientemente un conocido estratega de renta variable global, en un contexto de crecimiento económico mundial y expectativas de más recortes de tipos por parte de la Fed, sería poco habitual ver una corrección profunda o un mercado bajista sin que medie una recesión clara.

Mientras tanto, la cuestión inmediata para los inversores es si el tradicional “Santa Claus rally” logrará imponerse en las pocas sesiones que quedan del año o si 2025 se despedirá con un simple gesto de toma de beneficios tras un ciclo alcista que, por ahora, sigue muy vivo.