Apple podría reducir la producción del iPhone Air por sus ventas decepcionantes
El nuevo ciclo de lanzamientos de Apple ha traído resultados más que alentadores para la compañía. Según un reciente informe de una firma japonesa de banca e inversión, las ventas del iPhone 17 Pro y del iPhone 17 Pro Max superan las de sus predecesores en el mismo periodo del año pasado, impulsando una proyección de producción récord para 2026.
El iPhone 17 estándar ha sido, sin embargo, la gran sorpresa comercial: su desempeño ha superado con creces las expectativas y se posiciona como uno de los modelos más vendidos de la marca en los últimos años. Este éxito ha llevado a Apple a incrementar su previsión total de producción para la línea iPhone 17, pasando de 88 a 94 millones de unidades antes del inicio de 2026.
Fuentes cercanas al proceso de manufactura en Asia confirman que la demanda ha sido especialmente fuerte en Estados Unidos, Europa y mercados emergentes, donde los consumidores destacan la mejora en autonomía, cámara y conectividad con inteligencia artificial. Este crecimiento contrasta con el rendimiento más débil del iPhone Air, el modelo más ligero y económico de la gama, cuya producción se reducirá en un millón de unidades ante ventas por debajo de lo previsto.
Aun así, la historia no es la misma en todos los mercados. En China, el iPhone Air se agotó en pocas horas tras su lanzamiento, impulsado por campañas locales y su precio más accesible. Sin embargo, en los países occidentales su adopción ha sido más moderada, con analistas atribuyéndolo a la competencia directa de fabricantes Android y a la menor diferenciación técnica frente al iPhone 17 base.
Mientras tanto, el competidor surcoreano Samsung habría decidido cancelar los planes del Galaxy S25 Edge, su alternativa al iPhone Air, debido a un rendimiento comercial inferior al esperado. Este movimiento podría dejar a Apple con ventaja en el segmento de smartphones de gama media-alta, un espacio en el que la compañía busca expandirse sin canibalizar sus productos premium.
Los analistas destacan que la estrategia de Apple parece haber encontrado el equilibrio entre innovación y segmentación. El lanzamiento del chip A19, junto con un diseño más fino y una optimización de batería sin precedentes, habría sido clave para estimular las ventas y fidelizar a usuarios de generaciones anteriores.
El aumento en la producción no solo refleja un impulso de confianza, sino también una apuesta por mantener el liderazgo en un mercado cada vez más competitivo. Apple habría ajustado su cadena de suministro para absorber el incremento de seis millones de unidades, principalmente a través de socios en China, India y Vietnam.
A medida que se acerca 2026, el reto de la compañía será mantener la demanda sostenida en un contexto de saturación tecnológica y consumidores más selectivos. Por ahora, las cifras apuntan a un cierre de año en positivo, y con un claro mensaje: el iPhone 17 no solo consolida la posición de Apple, sino que marca el inicio de un nuevo ciclo de crecimiento tras años de estancamiento en ventas.