Europa suspende los envíos postales a EE.UU. tras el fracaso del acuerdo fiscal
La decisión, que afectará a países como España, Francia, Alemania o Reino Unido, llega después de que la Casa Blanca eliminara la exención fiscal para importaciones de bajo valor. El comercio electrónico transatlántico se prepara para un fuerte impacto.
Europa da un paso firme en respuesta a la política arancelaria de Estados Unidos. Tras el fracaso del acuerdo fiscal y la decisión de la Casa Blanca de eliminar la exención tributaria para productos de bajo valor —aquellos inferiores a 800 dólares, unos 682 euros—, varios países europeos suspenderán a partir de la próxima semana sus servicios postales hacia territorio estadounidense. Entre ellos se encuentran Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, España y Países Bajos. Bélgica se adelantó y ya interrumpió sus envíos el pasado viernes, mientras que Portugal, de momento, no ha adoptado ninguna medida.
La medida supone un giro relevante en el comercio internacional. Hasta ahora, los paquetes de menor cuantía estaban exentos de aranceles, lo que favorecía especialmente a las pequeñas y medianas empresas que exportan productos hacia Estados Unidos. Sin embargo, con la entrada en vigor de esta nueva normativa, todos los paquetes que superen los 800 dólares quedarán sujetos a aranceles aduaneros, generando incertidumbre tanto para los operadores postales como para los exportadores.
Las autoridades estadounidenses justifican la decisión alegando que buscan combatir prácticas ilegales como la importación de drogas a través del correo internacional. En este sentido, cartas y pequeños paquetes inferiores a los 100 dólares (unos 85 euros) no se verán afectados, dado que se consideran envíos de bajo riesgo.
En Europa, los principales operadores postales han expresado su preocupación. Royal Mail en Reino Unido asegura que trabaja para implementar un nuevo sistema que cumpla con las exigencias de Washington. Deutsche Post y DHL Parcel en Alemania señalan que todavía quedan cuestiones clave sin resolver, mientras que La Poste en Francia advierte que los plazos son insuficientes y los detalles técnicos incompletos. En España, Correos ha justificado la suspensión como una medida preventiva para proteger a los clientes y evitar problemas en las entregas.
El impacto será especialmente duro para el comercio electrónico transatlántico, un sector en constante crecimiento en el que las pymes europeas encuentran una vía de internacionalización. La suspensión temporal de los envíos amenaza con generar retrasos, costes adicionales y pérdida de competitividad frente a otros mercados.
La decisión de Donald Trump llega en un contexto de tensiones comerciales entre Estados Unidos y la Unión Europea, en el que los aranceles se han convertido en un arma de presión mutua. A partir del 29 de agosto, las nuevas reglas entrarán en vigor, redefiniendo las condiciones del intercambio postal entre ambos bloques y marcando un nuevo episodio en la guerra comercial.
