Este es el sueldo que manejará Mateu Alemany en el Atlético de Madrid
El Atlético de Madrid ha cerrado uno de los movimientos más relevantes de los últimos años en su estructura deportiva: la incorporación de Mateu Alemany como nuevo director deportivo. Su llegada supone una apuesta decidida por reforzar la gestión del área futbolística con uno de los ejecutivos más experimentados del fútbol español.
Aunque el club no ha revelado oficialmente las condiciones económicas del acuerdo, fuentes del sector apuntan a que Alemany podría percibir un salario que ronda los 1,5 millones de euros anuales, una cifra similar a la que cobraba en el FC Barcelona, donde se estimaba su retribución en torno a 1,4 millones de euros. Sin embargo, se especula con que el Atlético habría hecho un esfuerzo adicional, y su sueldo podría acercarse a los 2 millones de euros brutos por temporada, una cifra acorde con la relevancia de su nuevo rol dentro de la entidad.
Un fichaje con peso propio
El nombramiento de Mateu Alemany no es casualidad. El dirigente mallorquín llega al Metropolitano con una trayectoria consolidada y una reputación de gestor eficaz, capaz de equilibrar la exigencia deportiva con la sostenibilidad económica.
Durante su paso por el Barcelona (2021-2023), fue el artífice de numerosas operaciones clave, muchas de ellas en un contexto financiero complicado. Bajo su supervisión llegaron futbolistas como Robert Lewandowski, Jules Koundé, Raphinha o Andreas Christensen, además de cerrar incorporaciones estratégicas a coste cero, como Memphis Depay, Eric García o Sergio Agüero.
Su capacidad para negociar traspasos, reducir masa salarial y mantener el nivel competitivo del equipo fue determinante para devolver estabilidad al club blaugrana tras la salida de Lionel Messi.
Experiencia y perfil gestor
Antes de su etapa en el Camp Nou, Alemany ya había destacado como director general del Valencia CF, donde fue una figura clave en la clasificación del equipo para la Champions League y en la conquista de la Copa del Rey 2019 frente al propio Barcelona.
También fue presidente del RCD Mallorca, su club de origen, con el que llegó a disputar la final de la Recopa de Europa en 1999 y a conquistar la Copa del Rey en 2003.
Esa trayectoria polifacética —directivo, gestor y negociador— lo ha convertido en uno de los ejecutivos más respetados del fútbol español.
Por qué el Atlético apuesta por él
El Atlético de Madrid busca con Alemany reforzar su estructura deportiva y modernizar sus procesos internos, especialmente en el ámbito de fichajes, scouting y planificación de plantilla. Su llegada se produce en un momento clave, con la intención de garantizar una transición ordenada hacia una nueva etapa deportiva bajo la dirección de Diego Pablo Simeone.
Fuentes próximas al club destacan que su perfil “encaja perfectamente con la cultura del Atlético”: discreto, eficiente y con un profundo conocimiento del mercado nacional e internacional. Además, su red de contactos y su experiencia en operaciones de gran nivel pueden suponer un salto cualitativo para el área de planificación rojiblanca.
Un contrato acorde a su perfil
El salario que percibirá Alemany —entre 1,5 y 2 millones de euros anuales— lo situará entre los directores deportivos mejor pagados de LaLiga, una posición lógica si se considera su bagaje y el peso estratégico de su nuevo cargo.
El acuerdo incluiría, según fuentes cercanas a la negociación, bonus por objetivos deportivos y de rendimiento económico, vinculados a la clasificación para competiciones europeas, la revalorización de jugadores y los resultados de la primera plantilla.
Un movimiento de presente y de futuro
Con esta incorporación, el Atlético de Madrid no solo refuerza su estructura de gestión, sino que envía un mensaje claro: profesionalizar aún más el área deportiva para seguir compitiendo al máximo nivel frente a Real Madrid y FC Barcelona.
Mateu Alemany, que ha demostrado solvencia en situaciones límite y capacidad para equilibrar ambición y sostenibilidad, llega al club rojiblanco con la misión de construir un proyecto estable, rentable y competitivo.
Un salario alto, sí, pero acorde con el peso de la responsabilidad: dirigir la política deportiva de uno de los tres grandes del fútbol español y mantener al Atlético en la élite del continente.
