Israel llama a Pedro Sánchez "enemigo de la verdad" mientras se prepara para arrasar Gaza
Las relaciones diplomáticas entre España e Israel atraviesan un momento de máxima tensión. El Ministerio de Asuntos Exteriores español ha convocado por segunda vez en menos de una semana a la embajadora de Israel en Madrid, Dana Erlich, tras unas nuevas declaraciones del ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, quien calificó al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y a su gabinete como "enemigos de la verdad" y los acusó de antisemitismo.
Según fuentes citadas por varios medios españoles, la convocatoria responde a lo que el Gobierno considera una escalada verbal inaceptable por parte de miembros del Ejecutivo israelí. La semana pasada, la diplomática ya fue llamada a consultas tras unos comentarios "calumniosos" procedentes de la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu, que criticaban duramente el apoyo de España a la causa palestina.
En paralelo, se ha conocido que España ha cancelado un acuerdo de venta de armas con Israel, un movimiento interpretado como una señal clara de rechazo a la ofensiva militar israelí en Gaza, y en línea con el mensaje político que Moncloa ha transmitido en foros internacionales: un respaldo explícito a los derechos del pueblo palestino y la exigencia de un alto el fuego.
Avanza la ofensiva terrestre en Gaza
Este nuevo episodio diplomático se produce en un momento especialmente delicado. Fuerzas israelíes han iniciado una ofensiva terrestre en los alrededores de Ciudad de Gaza, según informaron este martes dos funcionarios israelíes a CNN. La operación comenzó después de varios días de intensos bombardeos y marca una nueva fase en el conflicto, con la entrada de tropas en zonas urbanas del enclave palestino.
La ofensiva fue aprobada por el gabinete israelí a finales del mes pasado, pese a las advertencias de la comunidad internacional, incluidas las de Estados Unidos y la ONU, que han alertado sobre las consecuencias humanitarias y la dificultad para alcanzar un alto el fuego si las hostilidades continúan.
Desde Washington, funcionarios del Departamento de Estado han advertido que "queda poco tiempo para negociar un acuerdo de alto el fuego", y que el inicio de una operación terrestre podría cerrar la puerta a cualquier posibilidad inmediata de entendimiento.
Clima de confrontación
Mientras se intensifica la violencia sobre el terreno, el intercambio de declaraciones entre los gobiernos de Israel y España añade un nuevo frente de confrontación diplomática en Europa. El reconocimiento por parte del Gobierno de Pedro Sánchez del Estado palestino, junto a Irlanda y Noruega, ya había generado reacciones muy duras por parte de Tel Aviv.
Los últimos cruces evidencian una grieta profunda entre ambos gobiernos y refuerzan la percepción de que España está dispuesta a asumir un papel más activo y crítico frente a la actuación israelí en Gaza, incluso si ello supone un deterioro de sus relaciones bilaterales.
Por el momento, no se han anunciado medidas adicionales desde Madrid, pero el tono empleado por el ministro israelí Saar, sumado al avance militar en Gaza, sugiere que la crisis diplomática podría ir a más en los próximos días.
