Mercados europeos remontan el lunes: ¿respiro o falsa calma ante los riesgos bancarios?
Tras una jornada negra el pasado viernes, los principales índices europeos iniciaron la sesión de este lunes con un tono más positivo. El DAX alemán avanzó un 0,40% a las 8:00 h CET, el Euro Stoxx 50 repuntó un 0,84%, y el CAC 40 francés subió un 0,39%. Solo el FTSE 100 británico se desmarcó de la tendencia, con un ligero descenso del 0,18%. En el mercado de divisas, el euro se fortaleció un 0,18% frente al dólar hasta los 1,16736 USD, mientras que la libra se mantuvo estable en 1,34399 USD.
El rebote se produce en un contexto de alta sensibilidad tras conocerse un aumento significativo de los impagos de préstamos en Estados Unidos, un dato que sacudió a los mercados el viernes y reavivó el temor a un posible contagio financiero. Aunque los analistas coinciden en que el sistema bancario estadounidense sigue mostrando solidez, los inversores reaccionaron con inquietud ante la posibilidad de que los problemas de crédito se amplíen en los próximos meses, especialmente si las condiciones de financiación continúan endureciéndose.
En Europa, la atención se centra ahora en los próximos datos macroeconómicos. Alemania publicará sus cifras de precios de producción, un indicador clave para evaluar la evolución de la inflación industrial en la mayor economía del continente. Además, Eurostat dará a conocer los datos de producción en el sector de la construcción, que servirán para medir la fortaleza de la actividad económica en la eurozona en un momento de claros signos de desaceleración. Según las últimas estimaciones, el crecimiento en la región podría situarse por debajo del 0,5% en el tercer trimestre, lastrado por el enfriamiento del consumo y la debilidad de la demanda externa.
El comportamiento de los mercados refleja, en gran medida, un intento de estabilización tras semanas de volatilidad. “Estamos viendo un rebote técnico más que un cambio de tendencia”, apuntan desde ING. “El sentimiento inversor sigue frágil, condicionado por la incertidumbre sobre la política monetaria y los riesgos crediticios globales”. De hecho, el mercado de bonos continúa mostrando signos de tensión, con los rendimientos de la deuda alemana a diez años manteniéndose en torno al 2,4%, su nivel más alto desde principios de septiembre.
En paralelo, el Banco Central Europeo y la Reserva Federal estadounidense siguen bajo el escrutinio de los inversores. La expectativa general es que ambos organismos mantengan los tipos sin cambios en las próximas reuniones, aunque el tono de sus mensajes será determinante para definir el rumbo de los mercados. Una señal de que las subidas de tipos podrían haber tocado techo aliviaría la presión sobre la renta variable y el crédito corporativo.
El panorama, sin embargo, sigue lejos de despejarse. Las dudas sobre el crecimiento en Europa, sumadas a la inestabilidad geopolítica y al repunte de la morosidad en Estados Unidos, invitan a la prudencia. En este sentido, los analistas advierten que cualquier sorpresa negativa en los datos de inflación o producción podría revertir rápidamente las ganancias de este inicio de semana.
La jornada de hoy deja, en definitiva, un sentimiento mixto: por un lado, la recuperación de los índices europeos ofrece un respiro temporal a los inversores; por otro, los riesgos subyacentes siguen latentes y podrían poner a prueba la confianza del mercado en los próximos días. El equilibrio entre la estabilidad financiera y la desaceleración económica se mantiene como la gran incógnita del otoño bursátil europeo.
