Merz critica que Trump no entienda la fuerza de la UE y se ofrece como interlocutor europeo
El canciller alemán, Friedrich Merz, ha asegurado que la administración de Donald Trump “sigue sin entender” que la Unión Europea es una unión fuerte, pese a sus intentos de explicarle en Washington la naturaleza y la historia del proyecto comunitario. Merz se ha mostrado dispuesto a intervenir como interlocutor directo con el presidente estadounidense en cuestiones de seguridad europea y guerra en Ucrania, pero ha subrayado que Alemania y sus socios “no permitirán que nadie divida a Europa”.
Merz cuestiona la visión de Trump sobre la Unión Europea
El canciller alemán, Friedrich Merz, reveló que en su última visita a Washington intentó explicar al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la historia y el funcionamiento de la Unión Europea (UE), pero que la administración norteamericana “todavía tiene dificultades para entender que la UE es una unión fuerte”.
Merz reconoció que puede “entender cierta confusión” por parte de la Casa Blanca, porque el modelo europeo es “único” y no se parece a otros bloques internacionales. Sin embargo, advirtió de que esa falta de comprensión no puede servir de excusa para tratar a Europa como un mosaico débil de Estados enfrentados entre sí.
Unión Europea fuerte, pero abierta al diálogo
Ante las dificultades de Washington para tratar con las instituciones comunitarias, Merz sugirió que, como mínimo, Estados Unidos debería “hablar con los Estados miembros de forma directa” si no es capaz de canalizar de manera fluida la comunicación con Bruselas. En ese contexto, el canciller se mostró dispuesto a asumir un papel activo: “Estoy dispuesto a hablar con Trump en nombre de los Estados europeos” sobre cuestiones clave para la seguridad del continente.
Merz hizo hincapié en que, pese a las diferencias políticas y a la diversidad interna, la UE funciona como un bloque con intereses estratégicos compartidos, especialmente en materia de defensa, energía y apoyo a Ucrania.
Compromiso con la OTAN y la seguridad europea
El canciller recordó que Europa mantiene un firme compromiso con la OTAN y con la cooperación transatlántica. Subrayó la importancia de seguir trabajando con Estados Unidos para poner fin a la guerra en Ucrania y garantizar la estabilidad en el flanco oriental de la Alianza.
No obstante, Merz marcó una línea roja clara: “No dejaremos que nadie divida Europa”. Con esta frase, envió un mensaje directo tanto a Washington como a otros actores externos que pudieran tratar de explotar diferencias internas dentro del bloque.
Evitar fisuras internas en un contexto geopolítico tenso
Las palabras de Merz llegan en un contexto de alta tensión geopolítica, marcado por la guerra en Ucrania, las disputas comerciales, el debate sobre el gasto en defensa y las fricciones recurrentes entre Washington y algunas capitales europeas. En este escenario, Alemania intenta proyectarse como puente entre Estados Unidos y la UE, pero sin renunciar a la idea de una Europa más autónoma y cohesionada.
Al ofrecerse a hablar “en nombre de los Estados europeos” y, al mismo tiempo, recalcar que la UE es un bloque fuerte e indivisible, Merz busca reforzar el mensaje de que la cooperación con Estados Unidos es esencial, pero que no puede basarse en la fragmentación de Europa ni en la infravaloración de sus instituciones.
