La Agencia Tributaria lanza un comunicado para los que tienen Bitcoin: "Se debe declarar en este impuesto"
La Agencia Tributaria ha publicado este 2025 una actualización clave sobre la fiscalidad de las criptomonedas, un terreno que en los últimos años se ha vuelto cada vez más relevante por el crecimiento del mercado digital y la expansión de los criptoactivos. En su comunicado, el organismo recuerda que las criptomonedas deben considerarse bienes inmateriales con contenido económico, lo que implica que deben declararse tanto en el Impuesto sobre el Patrimonio como en el IRPF, dependiendo de los casos.
Qué considera Hacienda una “moneda virtual”
Según la definición recogida en la Ley 10/2010, la moneda virtual —también conocida como criptomoneda— es una representación digital de valor no emitida ni garantizada por un banco central o autoridad pública. No tiene el estatus de dinero oficial, pero puede usarse como medio de intercambio y almacenarse o negociarse electrónicamente.
Esto incluye tanto al Bitcoin como a todas las llamadas altcoins (monedas alternativas como Ethereum o Cardano), los stablecoins (como USDT o USDC, vinculados al valor del dólar o del euro) y los tokens, que pueden representar desde derechos de inversión hasta servicios digitales.
Hacienda deja claro que todas ellas, si tienen valor económico y son propiedad de un contribuyente residente en España, deben formar parte de su declaración de bienes.
Así deben declararse las criptomonedas en el Impuesto sobre el Patrimonio
Los titulares de criptomonedas deberán incluirlas en su declaración del Impuesto sobre el Patrimonio.
El valor de las monedas virtuales se calculará a 31 de diciembre de cada año, tomando como referencia su precio de mercado en euros.
Cada contribuyente tendrá que declarar el saldo total de cada moneda virtual diferente que posea en esa fecha, sin importar si las mantiene en un exchange, una wallet fría o una plataforma de terceros.
Esto implica que Hacienda ya no distingue entre criptomonedas almacenadas en plataformas nacionales o extranjeras: todas deben declararse si el titular es residente fiscal en España.
Obligación de informar sobre los saldos y operaciones
La Agencia Tributaria también recuerda la obligación de informar sobre los saldos y movimientos de criptomonedas, establecida en la Ley 11/2021 de medidas contra el fraude fiscal.
Desde esa fecha, las personas o entidades que custodien criptomonedas o gestionen claves privadas —como exchanges, brokers o plataformas de compraventa— deben presentar una declaración anual informando sobre los titulares, autorizados o beneficiarios de las monedas virtuales.
Dicha información incluirá:
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Nombre, apellidos o razón social del titular.
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NIF o número de identificación fiscal.
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Claves públicas asociadas a las criptomonedas.
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Saldos a 31 de diciembre de cada año.
Esta medida busca aumentar la trazabilidad y transparencia de las operaciones con activos digitales, un terreno que durante años ha sido difícil de fiscalizar debido al anonimato que ofrece la tecnología blockchain.
Tokens, stablecoins y otras categorías: todo cuenta
Hacienda distingue tres grandes tipos de tokens o activos digitales:
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Tokens de pago, que funcionan como criptomonedas puras (Bitcoin, Litecoin).
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Tokens de seguridad, vinculados a inversiones o derechos de participación en empresas.
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Tokens de utilidad, que permiten acceder a servicios o productos dentro de una plataforma.
Todos ellos pueden tener implicaciones fiscales si representan un valor económico o una expectativa de ganancia.
Pendiente de desarrollo reglamentario
Aunque la normativa básica ya está aprobada, la Agencia Tributaria advierte que algunos aspectos del régimen informativo aún están pendientes de desarrollo reglamentario. Esto incluye detalles técnicos sobre los formularios y los plazos exactos para las declaraciones anuales.
No obstante, el mensaje de Hacienda es claro: quien posea criptomonedas debe declararlas. La opacidad ya no es una opción.
Un paso más hacia el control total del mercado cripto
Con esta actualización, España se suma al esfuerzo europeo por regular y fiscalizar el mercado de activos digitales, en línea con la nueva normativa MiCA (Markets in Crypto-Assets) de la Unión Europea.
La Agencia Tributaria busca que ningún activo digital quede fuera del radar, y que los beneficios derivados de criptomonedas tributen como cualquier otro bien o inversión.
Para los contribuyentes, esto significa una cosa: si poseen criptomonedas, deben incluirlas en sus declaraciones anuales y estar preparados para justificar su procedencia, valor y titularidad ante Hacienda.
