Wall Street rebota con fuerza tras cesación del fuego entre Israel y Hamas: ¿empieza un nuevo rally?
Los futuros de acciones en Estados Unidos operaban con optimismo este lunes tras el anuncio del alto al fuego entre Israel y Hamas, estructurado en dos etapas para liberar rehenes. En la primera fase fueron liberados siete israelíes, y en la segunda trece más, dando paso a una relativa calma en el frente geopolítico. Ese desenlace permitió que los mercados revirtieran parte de las pérdidas recientes. Según datos preliminares, el Dow Jones Industrial Average registró un alza del 1,51 % a las 4:19 am ET; el Nasdaq 100 subió 2,85 % y el S&P 500 avanzó 2,14 %. Estas subidas reflejan un apetito renovado por activos de riesgo ante el debilitamiento del factor de “prima de guerra”.
Sin embargo, la recuperación no es uniforme. Europa y Asia presentaron movimientos mixtos este lunes, con caídas en los índices asiáticos ante nuevas preocupaciones por la guerra comercial entre Estados Unidos y China. En ese sentido, el conflicto comercial sigue actuando como contrapeso ante el impulso político.
El acuerdo de cese de hostilidades también ha modulado flujos de capital hacia activos refugio y el dólar ha ganado terreno frente a varias monedas. En concreto, el euro cayó un 0,21 % frente al dólar, situándose en 1,15945 USD. Otro factor de interés es la llegada del presidente estadounidense, Donald Trump, a Israel. Se espera que pronuncie un discurso ante la Knesset, fortaleciendo su papel como mediador en el proceso. Esa exhibición política podría reforzar la confianza del mercado en una agenda diplomática activa.
Con el riesgo geopolítico decreciendo, el precio del petróleo ha mostrado ligeras caídas o correcciones. Los mercados interpretan el alto al fuego como una señal de menor amenaza de escalada regional que perturbe el suministro de crudo. Según analistas, aunque la respuesta inmediata es de cierto alivio, el mercado energético seguirá atento a posibles desvíos logísticos, tensiones latentes o rebrotes de conflicto que puedan reactivar la prima de riesgo sobre el crudo. Por otro lado, los metales preciosos, tradicionalmente buscados en escenarios de incertidumbre, mantienen su protagonismo. El oro, por ejemplo, sigue cotizando en niveles elevados dado su rol de activo de refugio frente a eventos inesperados.
A pesar del optimismo, persisten factores que podrían frenar el rally. Una recaída del conflicto no está descartada, y el acuerdo de alto al fuego no garantiza su estabilidad. Cualquier reanudación de hostilidades reactivaría la aversión al riesgo. También pesan las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, el rumbo de la política monetaria estadounidense y la publicación de datos macroeconómicos y resultados empresariales, que podrían inclinar el ánimo del mercado en una u otra dirección.
El acuerdo de cese de hostilidades entre Israel y Hamas ha abierto una ventana de oportunidad para los mercados globales. Pero ese impulso debe ser evaluado bajo la lupa del riesgo residual: el conflicto puede reactivarse, la guerra comercial sigue latente y las decisiones de los bancos centrales marcan el telón de fondo. Para el inversor, se presenta una fase de transición en la que conviene favorecer valores con sesgo defensivo, vigilar la agenda geopolítica y calibrar la exposición a sectores sensibles a las materias primas y la política comercial.
