Gemini, la nueva plataforma de Google para el Gobierno de EE. UU.
La tecnológica lanza una solución desarrollada junto a la Administración de Servicios Generales que integra IA, generación de contenidos y búsqueda empresarial a un coste simbólico, consolidando su presencia en la estrategia pública de digitalización.
Google vuelve a mover ficha en el terreno de la inteligencia artificial y lo hace apuntando directamente al sector público estadounidense. Este jueves la compañía ha presentado Gemini for Government, una nueva plataforma desarrollada en colaboración con la Administración de Servicios Generales (GSA) que pretende acelerar la modernización digital de las agencias federales.
El proyecto se enmarca dentro del plan de acción de inteligencia artificial impulsado por el presidente Donald Trump y en la estrategia OneGov de la GSA, cuyo objetivo es unificar y simplificar la gestión de servicios públicos mediante tecnología de vanguardia.
La propuesta de Google resulta especialmente llamativa por su precio: menos de 0,50 dólares por agencia al año. Un coste simbólico que abre la puerta a una adopción masiva de sus soluciones en los organismos públicos. El paquete incluye funciones avanzadas como búsqueda empresarial, generación de imágenes y vídeos, la herramienta NotebookLM y agentes de IA personalizables capaces de adaptarse a las necesidades de cada entidad.
Con esta iniciativa, Google no solo amplía el alcance de Gemini —su modelo de inteligencia artificial más ambicioso—, sino que refuerza su estrategia de posicionamiento en la nube pública y en el ecosistema de IA aplicada a la gestión estatal. Desde la compañía recuerdan que este paso se suma a anteriores descuentos en productos como Workspace, con el mismo propósito de democratizar el acceso a la innovación digital en el ámbito público.
Además, la inclusión de Gemini en la lista oficial de adquisiciones de la GSA sitúa a Google en un selecto grupo de proveedores estratégicos, junto a nombres de peso como ChatGPT y Claude. El movimiento refleja cómo la competencia en inteligencia artificial se traslada ahora también a los contratos gubernamentales, donde la credibilidad tecnológica y la seguridad de la nube son tan determinantes como la eficiencia económica.
En definitiva, Google lanza un mensaje claro: la inteligencia artificial no es solo un motor de innovación para empresas privadas, sino también una herramienta clave para transformar la relación entre la Administración y los ciudadanos.
