OpenAI impulsa un PAC para defender la inteligencia artificial en Washington
Greg Brockman, presidente de OpenAI, ha anunciado la creación de Leading the Future, una red de comités de acción política (PAC) que busca apoyar el desarrollo de la inteligencia artificial en Estados Unidos. Silicon Valley destina más de 100 millones de dólares para influir en la agenda política de las elecciones intermedias y frenar iniciativas reguladoras.
Silicon Valley ha dado un paso decisivo hacia el terreno político. Greg Brockman, presidente de OpenAI, confirmó que la compañía está financiando una red de comités de acción política bajo el nombre Leading the Future. El objetivo es claro: proteger la innovación en inteligencia artificial en un contexto electoral cada vez más marcado por el debate sobre el impacto y la regulación de esta tecnología.
De acuerdo con The Wall Street Journal, las empresas tecnológicas ya han comprometido más de 100 millones de dólares en estos PAC. La estrategia se centrará en donaciones de campaña y campañas digitales que respalden a candidatos favorables a la innovación y que desafíen a aquellos cuya agenda pueda frenar el crecimiento del sector.
Los impulsores de Leading the Future consideran que existe un movimiento cada vez más fuerte dentro de la propia industria tecnológica que apuesta por imponer limitaciones estrictas al desarrollo de modelos de IA. Desde su perspectiva, estas restricciones pueden frenar el liderazgo de Estados Unidos en el escenario global y limitar el acceso de los trabajadores a los beneficios que promete la nueva ola de empleo e innovación.
Josh Blasto, uno de los directores de la iniciativa, advirtió que la oposición a la inteligencia artificial está creciendo y que es necesario un contrapeso que asegure que las decisiones políticas no comprometan la competitividad del país. “Hay una enorme fuerza que busca frenar la implementación de la IA e impedir que el trabajador estadounidense se beneficie del liderazgo de Estados Unidos en esta innovación global”, señaló.
La apuesta de Silicon Valley también busca recuperar la confianza de los inversores, que la semana pasada mostraron dudas en Wall Street tras los ajustes en el sector tecnológico. Ahora, con un frente político organizado, la expectativa es que las compañías puedan reforzar su papel en la agenda pública y disipar temores sobre un freno regulatorio excesivo.