Turquía no permitirá la fragmentación de Siria y continua defendiendo Palestina
El presidente turco Erdoğan afirmó este miércoles que Turquía tomará medidas si los esfuerzos diplomáticos en Siria fracasan, reiterando su firme postura en defensa de la integridad territorial del país vecino. Además, expresó el compromiso continuo de Turquía con la causa palestina, destacando la responsabilidad del mundo islámico y de la comunidad internacional en la búsqueda de una paz duradera en Gaza.
En su discurso ante los legisladores en Ankara, Erdoğan enfatizó que Turquía ha estado comprometida con los esfuerzos diplomáticos para preservar la integridad territorial de Siria y prevenir la formación de estructuras terroristas a lo largo de su frontera sur. Al referirse a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), lideradas por kurdos y consideradas por Ankara como una extensión del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Erdoğan advirtió que si las iniciativas diplomáticas no son respondidas, la política de Turquía es clara: no permitirá que se repita lo sucedido en el pasado en Siria.
Este pronunciamiento se produce en un contexto de creciente preocupación por la estabilidad en la región, especialmente tras los recientes avances en la integración de las SDF en el marco institucional sirio, un proceso que Ankara observa con cautela. Erdoğan ha reiterado en varias ocasiones que cualquier intento de fragmentar Siria o de establecer una entidad autónoma kurda en el noreste del país será considerado una amenaza directa para la seguridad nacional de Turquía.
En cuanto a Palestina, el presidente turco destacó la responsabilidad primordial del mundo islámico en garantizar la paz en Gaza, seguida por la comunidad internacional. Erdoğan elogió al parlamento turco por haber aprobado resoluciones que apoyan a Palestina, calificando su actuación como una muestra de orgullo nacional y compromiso con la justicia. Además, expresó su esperanza de que pronto se logre una paz duradera en la región, que permita a los palestinos vivir con dignidad y seguridad.
La postura de Turquía en estos dos temas refleja su enfoque de política exterior basado en la defensa de la integridad territorial de sus vecinos y en el apoyo a las causas que considera justas, como la palestina. Sin embargo, también ha generado tensiones con actores internacionales, especialmente con Estados Unidos, que mantiene relaciones con las SDF, y con Israel, que ha criticado la influencia de Turquía en Siria y su apoyo a los grupos palestinos en Gaza.
A medida que la situación en Siria continúa evolucionando, la comunidad internacional observa de cerca las acciones de Turquía, que ha dejado claro que está dispuesta a actuar para proteger sus intereses y los de sus aliados en la región. La combinación de una política exterior asertiva y un firme compromiso con sus principios podría definir el papel de Turquía en los próximos años en el escenario geopolítico del Medio Oriente.
