Buen dato para la economía española: 118.400 empleos más entre julio y septiembre
El mercado laboral español sumó 118.400 nuevos puestos de trabajo entre julio y septiembre de 2025, situando el total de ocupados en 22,39 millones, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). A pesar del fuerte aumento del empleo, la tasa de paro repuntó ligeramente hasta el 10,45 % por la incorporación de más personas al mercado laboral.
España sigue sumando empleo, aunque el ritmo de crecimiento del mercado laboral comienza a mostrar signos de madurez. Los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre, difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), reflejan un balance positivo de 118.400 ocupados más, lo que eleva el número total de trabajadores a 22,39 millones, el nivel más alto desde 2008.
No obstante, la tasa de paro subió ligeramente al 10,45 %, 0,17 puntos más que en el trimestre anterior, debido al aumento de la población activa, que creció en 178.500 personas. Este incremento indica que más ciudadanos están buscando empleo, un fenómeno habitual tras el verano, cuando se amplía la fuerza laboral disponible.
Por sectores, los mayores aumentos de empleo se concentraron en la industria, los servicios y la construcción, tres motores clave de la economía. En cambio, el sector agrícola perdió 17.400 puestos, afectado por la estacionalidad y las condiciones meteorológicas adversas.
La calidad del empleo también mostró mejoras: los contratos a tiempo completo aumentaron en 314.500 personas, compensando la reducción de 196.100 empleos a tiempo parcial. El sector privado lideró la creación de empleo, con 107.600 nuevos puestos, mientras que el sector público añadió 10.800. Por el contrario, el número de trabajadores autónomos descendió en 10.500, reflejando las dificultades del trabajo por cuenta propia en un entorno de costes crecientes.
Pese al leve aumento del desempleo, los analistas valoran las cifras como una señal de resistencia del mercado laboral español en un contexto económico global más incierto. El empleo crece a un ritmo sostenido, apoyado por la fortaleza del turismo, la construcción y la inversión industrial.
La ministra de Economía destacó en un comunicado que “España mantiene un crecimiento del empleo sólido, compatible con la estabilidad macroeconómica”, aunque reconoció la necesidad de seguir impulsando políticas de formación y productividad.
De cara a los próximos meses, los expertos prevén una moderación en el ritmo de creación de empleo, en línea con la ralentización del PIB, pero sin riesgos de deterioro significativo del mercado laboral. Los desafíos seguirán siendo estructurales: el alto paro juvenil, la temporalidad y el bajo dinamismo del empleo autónomo.
En conjunto, los datos del INE confirman que la economía española sigue creando trabajo neto, pero el reto será consolidar ese crecimiento en un entorno de desaceleración europea y creciente presión salarial.