Dow Jones: DIA alcanza su media de 50 días y se juega el rumbo a medio plazo
El Dow Jones Industrial Average (DIA), uno de los principales referentes de la bolsa estadounidense, atraviesa un momento decisivo. Tras la fuerte corrección del pasado viernes, cuando el índice perdió casi 900 puntos en una sola sesión, el promedio se ha estabilizado justo en su media móvil de 50 días, un nivel técnico clave que podría determinar el rumbo del mercado en las próximas semanas.
El desplome del viernes —una caída del 1,9% que llevó al Dow a cerrar en 45.479,60 puntos— se produjo después de un inicio de jornada optimista que se revirtió bruscamente tras las nuevas amenazas del expresidente Donald Trump de imponer “tarifas masivas” a China. Las declaraciones, que reavivaron el temor a una nueva guerra comercial, provocaron ventas generalizadas y un rápido giro en el sentimiento de los inversores.
El impacto fue inmediato. El S&P 500 cayó un 2,71%, hasta 6.552,51 puntos, mientras que el Nasdaq Composite se desplomó un 3,56%, cerrando en 22.204,43, su peor desempeño desde abril. El “flight to safety”, o huida hacia activos defensivos, fue evidente: los inversores abandonaron las grandes tecnológicas y se refugiaron en valores de consumo básico y servicios públicos.
Jed Ellerbroek, gestor de cartera de Argent Capital Management, lo resumía así para CNBC: “La reacción inicial del mercado fue buscar seguridad. Las compañías con exposición directa al conflicto comercial fueron las más castigadas. Y como las grandes tecnológicas representan casi la mitad del S&P 500, cualquier golpe a ese sector tiene un efecto dominó inmediato”.
Desde el punto de vista técnico, el movimiento del Dow ha llevado al índice a tocar su media de 50 días, una zona que los analistas consideran de soporte intermedio. De mantenerse sobre ese nivel, el mercado podría intentar un rebote y consolidar la tendencia alcista que ha caracterizado el último trimestre. Sin embargo, una ruptura clara por debajo abriría la puerta a una corrección más profunda, posiblemente hacia la zona de los 45.000 puntos, donde se ubica la siguiente área de soporte relevante.
El contexto, además, es complejo. El gestor y multimillonario Ray Dalio, fundador de Bridgewater Associates, advirtió el viernes que el rápido aumento de la deuda estadounidense recuerda a los patrones previos a la Segunda Guerra Mundial. “Nos encaminamos hacia una bomba de déficit y deuda”, alertó Dalio, quien además señaló crecientes divisiones internas en EE. UU. como un riesgo adicional para la estabilidad del país y los mercados.
En paralelo, el aumento de la volatilidad confirmó el nerviosismo de los inversores. El índice VIX, conocido como el “medidor del miedo” de Wall Street, se disparó más de un 30%, alcanzando niveles no vistos desde junio. Esa subida refleja una demanda elevada de protección frente a nuevas caídas, especialmente entre las acciones tecnológicas y los valores más expuestos a China.
A pesar de la tensión, algunos bancos de inversión mantienen una visión optimista a medio plazo. Desde UBS, el analista Burkhard Varnholt recordaba que este fin de semana se cumplen tres años del actual mercado alcista, nacido tras el desplome de 2022. “Creemos que el bull market sigue intacto y que el impulso tecnológico no es una burbuja, sino una transformación estructural”, explicó.
El panorama, por tanto, combina señales contrapuestas: fundamentos sólidos en sectores como inteligencia artificial y biotecnología, pero una creciente fragilidad ante los vaivenes políticos y las tensiones comerciales.
Para el corto plazo, todo se jugará en los niveles actuales. Si el Dow logra mantenerse sobre su media de 50 días, podría reanudar su senda alcista hacia los 46.000 puntos. Pero si la presión vendedora persiste y el índice perfora esa barrera, los analistas advierten que el mercado podría volver a probar la zona de ruptura previa, poniendo en duda la estabilidad del ciclo alcista.
En definitiva, la sesión del viernes ha devuelto la incertidumbre a un mercado que parecía confiado en la continuidad del crecimiento. La próxima semana será crucial: los inversores observarán si la corrección se convierte en una oportunidad o en el primer aviso serio de un cambio de tendencia. En esos niveles se decidirá todo.
